Guy Ritchie es un director al que yo tengo muy arriba. Sus películas sobre el bajo mundo británico brillaban por sus historias y por su forma visual de llevar la historia, de hecho ‘REVOLVER’, protagonizada por un pelilargo Jason Statham y Ray Liotta, es una de mis favoritas. Su estilo tan marcado le llamo la atención a los cabecillas de Hollywood, en donde se lanzó a los blockbusters con ambas entregas de ‘SHERLOCK HOLMES’ (con una tercera en desarrollo), protagonizada por las superestrellas Robert Downey Jr y Jude Law. En la primera de estás el director prefirió correr menos riesgos, y se mando a hacer una película mas generica. Recién en su secuela ‘A Game of Shadows’ se le dejo meter mas sus planos subjetivos y veloces, generando un film medio flojo de guión pero visualmente genial. Ahora con Disney Ritchie hizo lo mejor que pudo, sinceramente con todas las limitaciones creativas que Disney pone en sus películas defiendo al director porque se nota que hizo lo mejor que pudo, sacando adelante una remake divertida pero fácil de olvidar.
La historia suena parecida a la de la película original, pero el intento de modernizar la historia fracasa fuerte. Un ladroncito arabe llamado Aladdin (Mena Massoud) es manipulado por el hechiero Jafar (Marwan Kentari) para que éste entre a la caverna de las maravillas y le lleve la lampara de EL GENIO, interpretado por un Will Smith exageradamente alegre. El pibe frota la lampara y el azulado personaje le cuenta que tiene tres deseos, los cuales planea usar para sorprender a la princesa Jasmín.
Para empezar el personaje de Jafar ni siquiera está cerca de cumplir con la espectativa que uno tenía con ver, en acción real, una versión de éste personaje tan bien diseñado. El personaje es como uno de esos villanos genericos de los años 30, con antifaces, galera y bigote, hasta una risa macabra y todo incluido. El actor elegido no es Jafar ni de cerca, no me lo creí ni por un segundo, la motivación del personaje en la película original era mucho mas clara, acá empieza queriendo ser el numero uno del sultan para despues quererse convertir en sultan y despues en emperador y despues casarse con Jasmín y convertirse en Dios y llega un punto en el que te perdes. Encima tenemos a una Jasmín que es pura bajada de linea progresista, sin ningun tipo de disimulo. Lo único que ella busca es ser sultana, algo ridículo no por el hecho en sí, una historia así podría ser buena, pero acá se convierte en una subtrama totalmente de relleno y con una peste política muy obvia. Will Smith como EL GENIO es básicamente eso, Will Smith haciendo de un genio. Es Will Smith, vestido de genio y nada más. Los poderes y comentarios del personaje son practicamente los mismos a los de la versión de Robin Williams, no hubo un gran cambio de estilo al respecto.
La música es regular, se le agregan temas que la verdad que ya ni recuerdo, pero los covers de las canciones originales son bastante rítmicos y el ojo de Ritchie los acompaño con una dirección muy energica y fluida. La puesta en escena se nota muy artificial, lo mismo con el CGI en muchas escenas. La cara de Will Smith en el cuerpo de El Genio parece mas un filtro de snapchat que un personaje motion capture.
Si comparo ‘Aladdin’ con ‘Dumbo’, definitivamente me quedo con ésta primera, a pesar de ser mediocre al menos es entretenida. Aunque siendo franco poner esa comparación solo deja en evidencia mis ganas de levantar este bodrio solo porque lo hace mí querido Guy Ritchie, la verdad les recomendaría que se queden con la versión animada en la mente y dejen pasar éste proyecto.
¿¿y la remake de ‘El Rey León’?? Creo que es momento de paniquearnos.