«Red notice» llama la atención, primeramente, porque es una película que podría ir perfectamente a salas comerciales, sin tener que pertenecer al catálogo de un servicio de streaming. Más allá de las cuestiones que ahora desgranaremos, es una apuesta grande de la «big N» en pos de consolidarse frente a la creciente cantidad de compañías que están alumbrando alternativas para desbancarla.
Hasta aquí, había cine arte vendido a Netflix en los pasados años en carácter de exclusividad («Roma» es el ejemplo perfecto), pero nunca un producto (insisto) de primera línea comercial y mainstream había llegado a los hogares tan rápido, siendo que a priori, contaba con potencial para hacer un dividendo en el box office global.
Debo decir, primero, que cada vez que veo a The Rock, me envuelve una sensación de incomodidad, porque no logro encontrarle el tono a sus últimos personajes. Sus líneas son básicas, no tiene química con nadie y excepto en contadas oportunidades, carece de diversidad de registro para la interpretación. Sí, ya se, Vin Diesel es peor. Bueno, no me acostumbro. Ustedes sabrán disculpar.
Johnson vuelve a convocar a un amigo para rodar, y en este caso se trata de Rawson Marshall Thurber, con quien hizo tándem en «Skyscraper», detrás de cámaras. Con el visto bueno de los productores, se sumó posteriormente al proyecto a dos grandes figuras de la industria actual, Ryan Reynolds y Gal Gadot, apostando a que su popularidad sea suficiente para garantizar calidad, cosa que desgraciadamente, no sucedió.
Pero…¿De qué va «Red notice»? La trama presenta a dos ladrones de joyas y obras de arte, que se enfrentan por la obtención de una serie de tres «huevos egipcios», posesión nada menos que de la glamorosa Cleopatra allá a lo lejos y hace tiempo. Al parecer, Dwayne (John, un investigador) quiere poner tras las rejas a Booth (Reynolds), porque cree que podría llegar hasta «el Alfil»(Gadot), figura prominente del crimen y con un trabajo bien hecho, ambos ladrones terminarían en la cárcel.
Lo que vendrá entonces, es una serie de pequeñas historias cortas, en distintas ciudades, donde los forzados compañeros tratarán de resolver los problemas derivados de la acción de esta búsqueda de las joyas, mientras lidian con problemas derivados de su forzosa actualidad.
Ya se imaginarán, Reynolds en modo «Reynolds», haciendo bromas a reglamento, la seducción embriagante de Gadot, cada vez más segura y ofreciendo confirmación explícita de su rango de súper estrella y Johnson… bueno, también en modo «ídem», haciendo lo que mejor sabe y más le gusta, se ve…
La cinta funciona porque la familiaridad y cierta dosis de humor de «pals», logran sostener en la primera parte la atención. Una vez que las piezas están dispuestas, hay menos sorpresas y el relato transcurre en forma más convencional. El guión intenta de a ratos alguna vuelta de tuerca, pero todos son arrestos discretos, que no logran impulsar la calidad de lo que estamos viendo.
Como nota de color, uno de los escenarios presentados (recorren varios países), está estructurado en estudio, lo cual, para nosotros en particular, nos hace preguntarnos… ¿no podía haberse cambiado el destino?¿el presupuesto no daba para otro viaje más? Sorprende y seguramente se harán ustedes, preguntas similares.
En cuanto al valor de la propuesta, es un film sin demasiadas aspiraciones más que entretener y ser vehículo para el lucimiento de la habilidad especial de cada protagonista. Es decir, en ese sentido no encontrarán nada nuevo aquí y libra por libra, quizás podría esperarse más para una película cuyo presupuesto es de 200 millones de dólares. Entiendo que aquí hay una especie de cross-over entre las viejas aventuras de Indiana Jones, algo de «National Treasure» (con Nicholas Cage, si no la recuerdan) y cualquier cinta de ladrones de guante blanco que recuerdes (por ejemplo «The Thomas Crown affair» aunque hay muchos más). Lo cual no implica que el resultado sea satisfactorio.
No sorprende, «Red notice». Seguramente ese equipo podía hacer una cinta más intensa y atractiva que la que verán. Pero está bien, un poco por debajo de lo esperable, cumple.