Su desarrollo se encuentra ambientado en el 2104, varios años después de los hechos de “Prometeo” (2012), pero años antes de los de “Alien: El octavo pasajero” (1979). Aquí la nave Covenant se dirige al planeta Origae-6, con un nuevo grupo humano, donde se encuentran: un androide, mujeres, hombres, embriones y todo está a cargo de una computadora cuyo nombre es “Madre”. Como es de esperar, el paraíso que esperan encontrar puede convertirse en un lugar peligroso y llegar a ser víctimas de los aliens. Es preferible no adelantar demasiados datos de su argumento. Dentro del elenco se encuentra la estupenda actuación de Michael Fassbender interpretando a dos personajes, se destacan: Noomi Rapace y Katherine Waterston (está lejos a Sigourney Weaver), entre otros personajes secundarios. Visualmente es un gran espectáculo, con varias secuencias deslumbrantes, una gran estética, entretenida y que no da respiro al espectador. Va mezclando varios géneros: la ciencia ficción, la aventura, el terror y el Thriller. Es más gore y violenta, terrorífica y oscura, en algunas secuencias hay un claro homenaje a “Alien el Octavo Pasajero” y “Aliens. El Regreso”. Se encuentra bien dirigida y contada pero en un momento va dando cierta información que no sirve mucho a la trama y posee ciertas pausas que no ayudan y rompen el ritmo. Esta historia continuará.