Otra de las películas que se suma a la nueva modalidad de estrenos a través de Cine.Ar TV y Cine.Ar Play es Alma pura, un drama psicológico dirigido y escrito por Roberto Salomone y protagonizado por Ingrid Grudke.
En el montaje que funciona como prólogo se nos presenta a la protagonista de Alma Pura: una mujer joven y bonita, una artista exitosa que podría tenerlo todo pero cuya adicción al alcohol y a las pastillas la llevó a terminar internada en un hospital psiquiátrico. Después de siete meses, el médico le afirma que no está loca, que sus problemas alucinatorios son a causa de las pastillas, y le da el alta haciéndole prometer que volverá regularmente a verlo.
Afuera está Paula, la hermana incondicional, lo único que le quedó de una familia a la que apenas recuerda. Ella se hace cargo de todo pero, quizás porque sus intenciones no son lo que parece o quizás porque de verdad no sabe cómo actuar en una situación para la que nadie nace preparado, es también quien le dice que si no quiere ver más al doctor mejor, un gasto menos, y por las dudas le deja una caja llena de pastillas, y le recuerda que su prioridad debe ser volver a pintar, que de algún lado tiene que salir el dinero para pagar todas las deudas.
Toda la película se sucederá entre las paredes de una vieja casona familiar, alejada de todo y de todos. Cuando se quede sola, cuando su hermana viaje a la Capital para resolver sus asuntos, se verá enfrentada a sí misma y a partes de un pasado que tenía completamente borrado.
Lo que empieza como un relato sobre una artista presionada para continuar creando, algo que solía funcionar a través de sustancias que la dañaron y que ahora quiere abandonar, pronto se va volviendo un drama psicológico con aires de fantástico. En medio de esos días, sola y aislada, entre intentos por pintar, conversaciones a medias con los empleados y lecturas de Baudelaire en francés, se ve interrumpida por visiones que se corren de lo ordinario. ¿Se está volviendo loca o hay otra presencia junto a ella?
A la historia se le suma la familia que trabaja en la casa: una pareja mayor que, a diferencia de ella, sí recuerda muy bien aquella tragedia familiar a la que se hace alusión pero que la protagonista no entiende porque no recuerda, y el hijo, un adulto cuyo retraso lo transforma en una especie de niño grande.
Ingrid Grudke es la protagonista de esta película y la acompañan Malena Sánchez en el rol de su hermana y Guillermo Pfening como este muchacho con quien logrará una conexión que con el resto nunca pudo. Grudke logra desempeñarse bien en su complejo rol, alguien que a veces tiene que decirse en voz alta que no está loca para terminar de convencerse, intentando reconstruir una tragedia familiar de la que le faltan muchas piezas para terminar de componer ese rompecabezas a causa de una infancia bloqueada, en blanco. Un rompecabezas en forma de una serie de cuadros que no consigue terminar.
Alma Pura es un drama psicológico cerca de funcionar como thriller pero que no consigue generar la tensión necesaria para serlo, un film que bucea en la psiquis de una mujer perturbada. Aunque algunos rasgos de su resolución no terminan de convencer y ciertos aspectos de la trama parecen algo forzados, consigue ser lo suficientemente intrigante y atrapante.