Reese Witherspoon en un desafío actoral que le valió una nominación al Oscar, en un film donde ella hace una gran entrega: una mujer en crisis total, después de la muerte de su madre, de sus adicciones y descontrol emprende una difícil caminata sobre la costa este de EEUU: son 1800 kilómetros de soledad, sufrimiento e introspección. Y aunque el film, dirigido por Jean_Marc Valle (“Dallas buyers club: El club de los desahuciados”) le esquiva al golpe bajo y a la lección de autoayuda, igual por momentos se advierten mesetas.