Muchas risas y poca sangre. De forma simultánea, llegó a los cines de todo el mundo la quinta y última parte de "La Saga Crepúsculo", franquicia basada en la serie de novelas escritas por Stephenie Meyer que ha marcado a toda una generación de lectoras asiduas del romance entre un vampiro y una humana.
Como espectadora y fanática de los libros, siento que el director Bill Condon ("Dreamgirls") no ha cumplido con las expectativas. La presentación de los títulos en fundido rojo y blanco (y muy largo por cierto), hace crecer más la tensión por ver qué pasó con Bella (Kirsten Stewart) desde la última escena en la que despierta al final de la primera parte de "Amanecer".
Lo que sigue a continuación es muy parecido a los films anteriores: escenas en la que la familia se reúne, pasea por el bosque, caza algún que otro animalito y dos especialmente románticas de los tortolitos que continúan su luna de miel eterna. Las mismas resultan ser cursis o chistosas para los fans como por ejemplo cuando Jacob (interpretado por Taylor Lautner) intenta explicarle a Charly (Billy Burke), el padre de Bella, que ella había "cambiado". Sutilmente, el chico se empieza a desnudar en cámara y se convierte en lobo. El griterío del público femenino -en su mayoría adolescente- rápidamente se escucha por todo el cine.
El personaje de vampiro histérico de Edward (encarnado por el actor en ascenso Robert Pattinson), sigue subestimando a su amada, aún cuando ella ya es convertida al vampirismo y es más poderosa que los Volturi y todo el clan Cullen juntos. En este film, el actor británico se encuentra más suelto y dinámico... y hasta se permite salirse del guión, al igual que papá Cullen, el doctor Carlisle (Peter Facinelli).
Otro punto criticable y que genera una extraña sensación de que estamos viendo un film de bajo presupuesto, es el efecto especial que se utilizó sobre el personaje de Reneesme. Es muy gracioso ver la diferencia visual de la cara de la beba en comparación al resto del elenco. Lo mismo ocurre cuando aparece Mackenzie Foy, la joven actriz que la interpreta más adulta.
Sin embargo, a pesar de la poco efectiva puesta en escena -ni la labor del mexicano Guillermo Navarro ("El Laberinto del Fauno") en la fotografía logra salvar el film- si hay algo que vale la pena destacar es el tan esperado momento del enfrentamiento entre los clanes, cuyos efectos que no se pudieron lograr en las anteriores, aquí se resaltan increíblemente. No apta para amantes del clan Cullen, ya que pueden volar cabezas.
Al final hay un video recopilatorio, en la que Bella y Edward recuerdan, recostados en el jardín de lirios, su historia de amor con escenas de las anteriores películas. Bien podría parecerse a un video editado por los fans y posteado vía YouTube. En lo que respecta a la música, la banda estadounidense punk rock Greenday presenta el tema principal titulado "The Forgotten", el cual vale la pena escuchar.
Se suponía que el film iba a trascender como una culminacíon épica, pero lamentablemente decepciona a la mayoría de los fans, ya que su final se asimila a las anteriores, sin ninguna novedad que deje boquiabierto al público. Sin dudas no fue la mejor de las cinco, pero hay que verla para cerrar el ciclo.