Pura química!
No tuvo suerte "Friends with benefits". Es la tercera comedia romántica que gira sobre el mismo tema en poco tiempo, ya hubo este año otras dos (una con Natalie Portman y Ashton Kutcher, la otra con Anne Hathaway y Jake Gyllenhall) similares, que si bien tenían matices, iban hacia el mismo lugar. O sea, es una historia que puede que no atraiga a quien han visto las anteriores. Corre en clara desventaja. Pero...
La tercera, amigos, por esta vez, fue la vencida. La más divertida y la que ostenta la pareja con mejor química es "Amigos con beneficios", sin dudas. Dirigida por Will Gluck, de quien no tenemos antecedentes que lo destaquen en particular, esta comedia romántica viene a hacer ruido. Está correctamente actuada y cuenta una historia divertida. Bien. No esperábamos mucho de una película que tenga a Justin Timberlake en su protagónico pero... La vida te da sorpresas no? El tipo está justo y mantiene el nivel que logró alcanzar en "The social network", claro, en otro registro.
Dylan (Timberlake) vive en LA. Tiene talento y una empleada hábil para descubrirlo, desde la otra punta del Gran País del Norte (New York), Jamie (Mila Kunis), lo convence de aceptar una oferta en trabajo en su revista, la prestigiosa GQ. A poco de su arribo a la Gran Manzana, ya sabemos que los dos se gustan mucho. Son jóvenes, inteligentes, abiertos... Pero... Vienen de sendas rupturas amorosas y al pasar algún tiempo juntos deciden probar tener sexo pero sin vincularse afectivamente. Sabemos que esto es más que común en nuestro tiempo, así como también las dificultades para sostenerlo en el tiempo. La cosa es que Dylan y Jamie comparten trabajo, juegos, salidas y charlas y van descubriendo que algo les pasa, por lo cual cuando llegue el momento de abordarlo, más allá de la explosiva relación física que los une. Habrá entonces que dinamitar los acuerdos previos que ambos hicieron y empezar de nuevo... o no.
Es convencional. Muy. ¿Dónde está entonces la gracia? Bueno, para empezar, Timberlake se ríe todo el tiempo de sí mismo (sabían que él es cantante no?), es muy gracioso verlo tararear una canción y que Kunis le tape la boca (la amamos por eso!), como también se ridiculiza mucho con los cuadros musicales que evocan a Kriss Kross (un chico rapero de los 90, si mal no recuerdo). Luce relajado, ocurrente y plástico. Se lo ve cómodo. Y Mila es un huracán. Ya sabemos que es una mujer seductora (recuerden "Black swan" este año), pero aquí la verán sarcástica, divertida y bella, en un estado casi natural. Entre los dos encienden la pantalla en las tomas de cama, que aunque están hecha con sentido cómico en su mayoría, despiertan los suspiros de la platea (masculina y /o femenina).
La película es muy "tech". El personaje de Dylan domina todos sus gadgets y le pone bastante color a la cosa, lo cual hace que lo que parece convencional, luzca ligeramente diferente. Ambos (Kunis y él) tienen papás muy especiales (ella Patricia Clarkson y él, Richard Jenkins) que acompañan los momentos en que la energía baja y afloran las emociones. En ese sentido, la película es equilibrada. Hay mucha adrenalina en la relación pero cuando llega el tiempo de las definiciones, nos regala exquisitas (si, increíble no?) secuencias de padre /madre / hijo / hija que sensibilizan y le dan vuelo al film.
No es que deje de ser una comedia romántica común estilo Hollywood. Sigue siendola. Pero tiene sus cosas. Está muy bien lograda, tiene una gran banda de sonido y sus protagonistas destilan química y fluídos durante toda la proyección.
Me gustó. Dentro de su género, hasta les diría que es levemente superior a sus antecesoras. Si van de a dos, seguro que la van a disfrutar mucho...