El contrato
Amor x sorpresa (De Surprise, 2015) es una comedia romántica nórdica, que surge a partir de una idea interesante y que dispara la acción del relato: ¿qué pasaría si en medio de una decisión drástica uno encuentra el verdadero amor?
Así, el film dirigido por el laureado Mike van Diem (Carácter), presenta a dos personajes desesperados, Jacob (Jeroen van Koningsbrugge) y Anne (Georgina Verbaan), quienes acuden a una misteriosa empresa llamada Elysum en la que acordarán su deceso.
Elysum es una organización que se encarga de terminar con la vida de personas que no pueden hacerlo por sí mismos: a partir de un contrato se establecen las pautas con las que se matará a cada persona que se acerque y contrate sus servicios. Jacob, ante la inevitable necesidad de finalizar sus días, acude al lugar para ver si pueden ayudarlo a terminar con el tedio por la reciente partida de su madre y por la imposible asistencia de los cientos de empleados que posee en la mansión que acaba de heredar. Mientras aguarda que su fin llegue, conoce a Anne, una mujer que en apariencia también está buscando una salida a su dramática situación.
Jacob y Anne comenzarán a conocerse, pero siendo conscientes que a ambos pronto la muerte le llegará, por lo que el compromiso no existirá y sí la sola idea de disfrutar hasta el último momento. Y en ese punto es en donde la película pierde solidez, porque al querer justificar una historia de amor, deja de lado su costado más simpático y cínico, cercano a la comedia negra, inclinándose por querer forjar un relato clásico de amor entre dos seres desesperados e incompatibles.
Cuando el guión se detiene en el detalle exhaustivo de los personajes, su entorno, y los empleados de Elysum, Amor x sorpresa gana en solidez y en su capacidad por forjar un relato que acerca al film a clásicos de la comedia de enredos y el policial más bizarro. Pero cuando quiere explorar en profundidad el romanticismo, más allá de la cuidad producción y puesta en imágenes, cae en lugares comunes y clichés que alejan a la historia de su esencia y potencia.
Amor x sorpresa vuela cuando, por ejemplo, intenta reflejar en imágenes el agobio de Jacob y sus infructuosos intentos de matarse, y choca consigo misma cuando utiliza el baile, por citar sólo un punto, como tema narrativo unificador de las penosas historias de ambos. Si el guión de Mike van Diem, Karen van Holst, tenía un potente punto de partida y posibilidad de desarrollo, la historia final termina por opacar ese destello original, llenando de convencionalismo al relato y terminando por hacer naufragar a una película que podría haber tenido otro tono y otra resolución.