Es 1957, y el estreno de una adaptación libre de Romeo & Juliet de Shakespeare, esta vez en versión musical, marcaría un antes y un después en la historia. West Side Story (Amor sin Barreras) con su libro adaptado por Arthur Laurents, música del genial Leonard Bernstein, letras del debutante Stephen Sondheim y coreografías de Jerome Robins, no solo sería un éxito de Broadway, sino que solo 4 años más tarde sería llevada a la pantalla grande dirigida por Robert Weize en conjunto con el mismísimo Robins, y al igual que su contraparte teatral, fue un éxito arrasador.
60 años después, Steven Spielberg decide hacer una remake de esta romántica tragedia, y es ahora el momento de ponernos de pie.