Una película ideal para fans de Jane Austen.
Para el público que no esté familiarizado con los trabajos de la escritora este film podría resultar un bodrio, pero quienes disfrutaron sus novelas seguramente se engancharán con Amor y amistad, ya que representa una de las mejores adaptaciones cinematográficas de la obra de la artista inglesa.
La película está basada en Lady Susan, uno de los trabajos menos populares de Austen que se publico tras la muerte de la autora en 1871.
Algunos de sus biógrafos destacan que Austen nunca estuvo conforme con su labor en esta historia y por ese motivo nunca la publicó, pese a que fue su primera labor literaria.
En el cine este relato no cuenta con grandes antecedentes salvo por una adaptación que brindó la BBC en el 2009.
La razones que no sea tan conocida y uno de los elementos que hace interesante a esta propuesta es que se trata de la historia más cínica de Jane Austen, quien a nivel popular es una artista asociada con el romance.
Lady Susan es la contracara de las heroínas sensibles que se destacaron en Orgullo y prejuicio, Sensatez y sentimiento y Emma.
La trama se centra en una mujer de treinta y pico, quien tras quedarse viuda manipula a todos los hombres de su círculo social para asegurarse un buen pasar económico.
A diferencia de otras creaciones de Austen como Emma Woodhouse o Elizabeth Bennet (Orgullo y prejuicio), quienes apostaban por el amor verdadero, Lady Susan está de vuelta en la vida y no le importa nada.
Seduce hombres casados y busca la atención de jóvenes a los que dobla en edad. Un personaje muy divertido y transgresor para el contexto social en el que se desenvuelve.
Estos elementos hacen que esta historia sea una propuesta muy diferente a los relatos que suelen ser asociados con la escritora.
La película del director Whit Stillman ( Los últimos días del disco) presenta una adaptación impecable que sigue con bastante fidelidad el relato original.
Kate Beckinsale, quien en 1996 había interpretado a Emma en un film para la televisión, acá sobresale en el rol de la manipuladora Lady Susan que logra ser una anti-heroína muy atractiva.
La comedia de Whitman desarrolla muy bien la sátira de la sociedad inglesa en la Era Victoriana que proponía la novela.
Salvo por el detalle que el argumento se desarrolla en Irlanda, en lugar de Inglaterra, el film sigue de cerca el conflicto del libro y hasta incluye diálogos originales de Austen.
Un riesgo que tomó Stillman, ya que los largos diálogos que mantienen los personajes de Austen en los libros en el cine podrían resultar monótonos.
Sin embargo el director le dio un ritmo dinámico a la narración de la historia y el conflicto se resuelve en 90 minutos.
La paradoja de este estreno es que se titula Amor y amistad, un nombre que Whit Stillman tomó de un cuento de Austen, cuando esos elementos precisamente brillan por su ausencia en esta historia.
Una ironía adicional para un relato que se burla del romanticismo victoriano.
Desde los aspectos técnicos la película sobresale en la puesta en escena del período histórico y los vestuarios que no pasan desapercibidos.
Kate Beckinale se encarga de llevar adelante la trama pero está acompañada por un muy buen reparto donde se destacan Chloë Sevigny (quien junto a Beckinsale había protagonizado Los últimos días del disco), Stephen Fry y Tom Bennet, un actor popular de la televisión inglesa que en este film tiene momentos desopilantes.
En resumen, Amor y amistad es una muy buena película que recrea una historia diferente de Jane Austen que nunca tuvo mucha difusión.