Terror sano y limpio para toda la familia.
Esa es la propuesta que ofrece la nueva entrega de Annabelle que fue concebida para entretener especialmente a los espectadores entre 10 y 12 años que recién empiezan a explorar el género.
Si bien las producciones previas con la muñeca no fueron precisamente obras de Lucio Fulci, en esta continuación se nota la intención de los productores por atraer a los cines a un público pre-adolescente.
Por consiguiente, para los aficionados más veteranos la película puede resultar extremadamente liviana y por momentos aburrida, debido al modo en que se trabajaron las situaciones de terror.
Todas las escenas de tensión que se presentan parecen salidas de un relato de la serie Escalofríos o un episodio de Scooby Doo, donde se crean escenarios lúgubres pero sin excederse en situaciones violentas u oscuras.
La trama es casi inexistente y sirve de excusa para que el director Gary Dauberman construya un compilado de sustos baratos muy predecibles que nunca llegan a ser emocionantes.
El campo más destacado de esta producción reside en el diseño de producción que es muy bueno.
El director implementa con efecto el uso de la niebla para establecer algunas atmósferas interesantes que parecen influenciadas por el clásico video Thriller, de Michael Jackson.
Muy especialmente en la secuencia inicial que protagonizan Patrick Wilson y Vera Farmiga, como el matrimonio Warren, que brinda probablemente los mejores minutos de la película.
En lo referido a los aspectos visuales esta entrega de Annabelle en general presenta un trabajo más inspirado que el bodrio de La llorona.
Mckenna Grace, quien se destacó en la serie The Haunting of Hill House ofrece una buena interpretación en el rol principal y está bien acompañada por el reparto secundario.
El resto del contenido lamentablemente es olvidable y no le aporta nada a la franquicia de El Conjuro que hace rato dejó de generar un mínimo entusiasmo.
Annabelle, como ocurrió en los filmes previos, es apenas un objeto decorativo en el conflicto y se consolida entre los personajes más insulsos y aburridos del cine de horror reciente.
Esta entrega en particular también abre la puerta a posibles producciones con otros personajes sobrenaturales, cuya concreción dependerá de la paciencia del público.
Reitero, para los chicos que recién empiezan a conectarse con el género este film puede ser más entretenido y comprendo en ese caso que la disfruten, pero para el resto, salvo que la veas gratis, no vale la pena perder el tiempo.
Será cuestión de esperar futuros estrenos como la segunda parte de It o Dr.Sleep que aspiran a ser más prometedores.