Con una mano en el corazón, ¿de qué se trataba “Ant Man: el hombre hormiga” (Peyton Reed, 2015)? Salvo que fuese un fanático del cine de Marvel (o del comic original) sería un buen desafío para el espectador común redactar una sinopsis sin caer en Don Google. Algunos retazos en la testa quedan. Estaba Michael Douglas, que era como una especie de mentor-padrino del personaje encarnado por Paul Rudd que, a su vez, se ponía un traje que le permitía reducirse a escala de miniatura. Punto. ¡Ah!, y la memoria indica que era muy graciosa y entretenida, pero nada más.
Ahora se estrena “Ant man and the wasp” ¿Cúal era el problema de traducir los nombres? ¿Sonaban “grasas” en español?, o sea, “El Hombre Hormiga y La Avispa”. Segunda parte de lo que fue un verdadero batacazo, es decir, superó las expectativas de recaudación, y esto probablemente se deba a que era (y éste lo es también) una comedia para chicos y grandes, además, o sea lejos de la otra comedia negra, violenta y auto-paródica de Marvel llamada “Deadpool”. (2016).
Así y todo, para ver éste estreno se le requerirá al interesado recordar los eventos acaecidos en “Capitán América: guerra civil” (Joe y Anthony Russo, 2016), ya que el argumento se instala a partir de lo sucedido en esa oportunidad (pregúntele a Google, cualquier cosa). Esta vez Hank Pym (Michael Douglas) y Hope, alias La Avispa (Evengeline Lilly) trazan una nueva misión para el Hombre Hormiga, misión que intentará cumplir a su pesar, ya que fue papá hace poco y por eso nuestro héroe anda con dudas. La misión por supuesto va a concatenar algunas cuestiones también del orden familiar y, sobre todo, presentará con pelos y señales al otro personaje del título. Entre ambos indagarán, aventura mutli-dimensional mediante, el universo al cual pertenecen descubriendo importantes indicios.
Más allá de su factura técnica, impecable por dónde se la mire, Peyton Reed se consolida como director de comedia, y este punto es la verdadera fortaleza del estreno. “El Hombre Hormiga y La Avispa” le va a dar a la audiencia, memoriosa o no, una buena dosis de gags y humor con buen timing, apoyados en ese gran comediante que es Paul Rudd quién, al igual que Ryan Reynolds en la otra franquicia, encontró el papel de su vida (sólo que el primero es claramente un actor con más recursos)
Realmente se va a entretener mucho. De la misma manera, cuando dentro de dos o tres años volvamos a hablar de la tercera, seguramente tendrá los mismos problemas que se revelaban al comienzo de este texto. La testa anda bien, no se preocupe. Es la inteligencia lo que ayuda a diferenciar un pasatiempo olvidable de algo más trascendental.