Los sospechosos de siempre
Nueva adaptación del clásico de Agatha Christie, mantiene un estilo clásico y para nada moderno.
Kenneth Branagh es casi todo en Asesinato en el Expreso de Oriente, no sólo porque es el director de una nueva adaptación de esa gema criminalística que es la novela de 1934 de Agatha Christie. El actor y director de Enrique V, Hamlet y La flauta mágica –pero también de la primera de Thor y la nueva La Cenicienta- se calzó el traje, el sombrero y los bigotes de Hercule Poirot, el famoso detective ex policía creado por la Dama del misterio.
No por conocida la trama -Poirot aborda el tren del título, donde se comete un crimen, y él debe dilucidar el caso descubriendo al o los responsables- y también la resolución, la película deja de entretener.
Por un lado, está que Asesinato… es un cuento inteligente, bien narrado, y es muy difícil que alguien pueda arruinarlo. Branagh no arranca con pie firme en el prólogo, pero todo se encarrila, anda sobre rieles cuando empiezan a subir los pasajeros al Expreso.
Tal vez la corrección política y racial que impera hoy en día haga ver o sentir algunas líneas de diálogo de manera disímil. El Dr. Arbuthnot, por ejemplo, que en la versión de Sidney Lumet de 1974 era Sean Connery, ahora es Leslie Odom Jr., que es negro.
Y mejor no continuar con las comparaciones, porque una remake es precisamente eso, rehacer algo que ya estuvo hecho. Y se entiende que si Branagh atacó este relato es porque algo nuevo habría de descubrirle.
Bueno, no es el caso. Branagh continúa el estilo clásico, no sólo por la época en que transcurre la historia (década del ’30), sino hasta por sus posiciones de cámara y puesta en escena.
Es cierto, vaya en su beneficio que si casi toda la película transcurre en vagones de tren, el encierro no le juega mucho a su favor. Salvo alguna grúa casi al final, el irlandés sigue siendo fiel al clasicismo.
En cuanto al elenco, Johnny Depp parece más macchietta que nunca, y Penélope Cruz se hace la santita, en la columna del Debe. En el Haber están los siempre puntillosos Judi Dench y Derek Jacobi, Daisy Ridley (Rey, en la nueva saga de Star Wars), Willem Dafoe y Michelle Pfeiffer.
Claro, son muchos más, y cada quien tiene su momento de lucimiento actoral, o habrá que decir coloquial. Porque si algo se destaca en esta adaptación, más que acción, es que hay mucho diálogo. Ah, y el tamaño del moustache de Poirot. Otra exageración.