La bomba que no fue
"Assassin's Creed" es una película que había generado muchas expectativas por tratarse de la adaptación del mundialmente famoso juego de video con el mismo nombre. Si a esto le sumamos que el protagonista iba a estar interpretado por Michael Fassbender, la probabilidad de éxito era muy grande.
El resultado es un tanto decepcionante, ya que si bien tiene una gran producción, buenos actores y mantiene la tensión casi todo el metraje, el guión tiene varios baches, con situaciones tiradas de los pelos y nunca llega a explotar para convertirse en un gran producto de acción. Se notó que hubo muchas ediciones torpes, con un protagonista hablando un rarísimo español y pocos detalles que hicieran al espectador empatizar con los personajes.
Si pensamos en el fanático de los videos juegos, varón menor de 30 años, creo que le va a pasar algo parecido a lo que sucedió con "Warcraft". La emoción de ver a su personaje virtual cobrar vida y el cuidado de la producción visual ya le va a sumar varios puntos. A esto le adicionemos que el reparto es muy talentoso e incluye nombres como Marion Cotillard, Jeremy Irons, Brendan Gleeson, Charlotte Rampling y el ya nombrado Michael Fassbender. Cuando el fan esté viendo "Assassin's Creed", sabrá que no va estar entre los mejores títulos del año ni cerca, pero presenta en su balanza un saldo levemente positivo porque entretiene y porque el mundo gamer le tiene un afecto que desafía lo objetivo. No va a ser un film memorable, ni siquiera entre las adaptaciones que ya hay de video juegos, pero logra atraer visualmente con peleas interesantes y la presencia en pantalla de sus actores maquilla de cierta manera las carencias de la historia. Lamentablemente no creo que tenga oportunidad de levantar la vara ya que no le fue muy bien en recaudación.
Una película para los más fanáticos que entretendrá pero no pasará a la historia de las adaptaciones de video juegos.