Un ejército de un solo hombre
Uno puede imaginar que, haciendo limpieza en la pila de guiones descartados para alguna de las secuelas de DURO DE MATAR, alguien pudo haber encontrado la trama de ATAQUE A LA CASA BLANCA, una película que tranquilamente pudo haber sido parte de la serie protagonizada por Bruce Willis pero que probablemente no lo haya sido porque, bueno, porque no es un muy buen guión que digamos…
De cualquier manera, un guión malo de los ’80 o ’90, con el tiempo, se convierte en un guión retro y tal vez es por eso que alguien decidió que era un buen momento para traerlo de nuevo a la vida y, de una vez por todas, filmarlo. No me tomen del todo en serio: seguramente se trata de un guión flamante, escrito hace poco tiempo, pero tiene claramente ese espíritu.
Olympus-Has-FallenEs que ATAQUE A LA CASA BLANCA recuerda en su estructura a DURO DE MATAR -es la saga de un agente del Servicio Secreto que tiene que rescatar al Presidente de los Estados Unidos secuestrado en un bunker de la Casa Blanca-, pero también trae a la memoria otras películas ochentosas como RAMBO o LOS JOVENES DEFENSORES (RED DAWN), de John Milius, o más de una película de Arnold Schwarzenegger de esa época, como COMANDO. En la puesta en escena, los bastante berretas efectos, el formato de héroe descarnado y canchero, y hasta por la propia situación que narra, ATAQUE… bebe mucho más de ese cine que de las superproducciones actuales.
Y no, no es una muy buena película, pero es muy divertida. Dirigida por Antoine Fuqua, un muy efectivo narrador de policiales y filmes de acción (DIA DE ENTRENAMIENTO y TIRADOR, entre ellos), la historia arranca contando el accidente que le cuesta la vida a la esposa del presidente de los Estados Unidos y el trabajo a Mike Banning (Gerard Butler), responsable de su seguridad personal, que por salvarlo a él (Aaron Eckhart) no pudo evitar la muerte de ella (Ashley Judd).
Olympus has Fallen 1Relegado a un trabajo de seguridad menor, Banning es testigo de una violenta y muy poco creíble toma a la Casa Blanca por un grupo de norcoreanos que entran al edificio haciéndose pasar por sus vecinos del Sur (que eso suceda y que puedan haber entrado armados hasta los dientes es bastante poco plausible) y que luego son apoyados desde fuera con camiones explosivos y ataques aéreos.
Llegando tarde al lugar, pero muy conocedor de la Casa, Banning logra meterse y tendrá la misión de desbaratar el asunto avanzando por los pasillos y oficinas del edificio y liquidando rivales en el camino. El muy buen elenco se completa con Morgan Freeman, Angela Bassett y Robert Forster como los responsables políticos/militares con los que Banning debe coordinar la recuperación del palacio presidencial.
Es una película cuyo nacionalismo exaltado recuerda los tiempos de Ronald Reagan, por lo que quedan avisados todos aquellos a los que ver flameando la bandera de los Estados Unidos agujereada, personajes recitando la Constitución o algún otro diciendo “hablá en inglés, motherfucker, que estamos en Estados Unidos” les molesta o espanta. Si logran superar eso -lo digo porque en la función de prensa a la que fui había muchos colegas fastidiados que no podían ver por encima de eso, como si fuera algo nunca visto-, se van a encontrar con una película inusualmente sangrienta, con mucho más combate mano a mano que efectos digitales (los que hay son tirando a berretas) y con escenas de acción y suspenso bien construidas que no le hacen asco a ninguno de los recursos clásicos de este tipo de situación.
Olympus-Has-Fallen-2Es cierto que Butler con los cachetes inflados de botox no es el colmo del carisma, pero el elenco que lo circunda cubre buena parte de ese problema, especialmente Freeman en un rol que, si bien es común en él (como Portavoz del Congreso está a cargo del país ante el secuestro del presidente y el vice) lo hace mostrando las dificultades de este hombre, que no está acostumbrado a tamaña responsabilidad. Por el lado de los secuestrados, un plus es la presencia intensa allí de Melissa Leo, como la Secretaria de Defensa.
A contramano de las superproducciones a escala global (se estrena mundialmente unos meses antes que EL ATAQUE, película de Roland Emmerich que comparte mismo tema), ATAQUE A LA CASA BLANCA no es una producción de los estudios sino un filme, en cierto modo, independiente, casi la versión siglo XXI de aquellos títulos del estudio Cannon que, en los años ’80, nos traían a Chuck Norris aniquilando invasores como mosquitos…