Una película que comienza con un leve tono de comedia, con un anclaje entre histórico y mito urbano que implica a las joyas de Evita empeñadas cuando Perón tenía todas sus cuentas intervenidas. La codicia de la mujer de Franco y un robo desesperado y consensuado llevado a cabo por dos perdedores. Lo que comienza leve se torna tenso y crece gracias a un dedicado trabajo de Guillermo Frnacella, un hombre que sabe mirar y entender en qué está metido y tiene el temple de aguantarlo todo. Bien Cabré, muy intenso Daniel Fanego (no hay papeles chicos para grandes actores). Un buen entretenimiento.