Martín se lastima durante una clase de natación. Sebastián, el profesor de gimnasia, lo lleva al hospital. Cuando salen se ofrece llevarlo a su casa pero Martín quiere volver al club de natación porque debia reunirse con un compañero para irse a quedar esa noche a su casa. La familia de Martín no esta esa noche en casa. El amigo de Martín no está y Sebastián se da cuenta que pasó la tarde y el alumno no tiene a donde ir. Nadie contesta en el colegio. Sebastián debe hacerse cargo y lo lleva a su departamento. Sebastian descubre que Martín ha mentido y que pudo irse a dormir a su casa esa noche como cualquier otra. Sebastián desconoce las verdaderas intenciones del alumno.