Cine catástrofe que llega de China, con un enorme presupuesto que pone el acento en hechos reales a la vieja usanza hollywoodense de defensa de los valores patrióticos, con discursos encendidos para el heroísmo, el sacrificio y el mandato de dejar en el mejor lugar a su país. Se trata de las dos ascensiones al Everest. Una en los años 60, que por falta de documentación de la llegada a la cima no fue reconocida (un escalador prefirió perder su cámara para salvar a un compañero) y el segundo intento, exitoso, en l975, cuando se transforman en los primeros en llegar a la cima y medir la altura de la imponente montaña.”Su montaña” aunque pertenezca a Nepal. Precisamente ese escenario permite tomas y trucas digitales vistosas e impresionantes, con avalanchas, grietas, rocas gigantescas y todos los chiches del género que se llevaron posiblemente casi todo presupuesto. Ese es el atractivo del film. Lo demás: Queda una actuación de Jackie Chan como estrella internacional, su discursito y dos tibios romances.