Avant En su debut en el cine, el realizador Juan Álvarez Neme, se aproxima en “Avant” (Uruguay, 2014) al particular universo de la danza desde la incorporación de uno de sus máximos exponentes, Julio Bocca, al Ballet Nacional del SODRE de Uruguay. La habilidad de Álvarez Neme radica, en parte, en poner el foco en esa llegada, como si fuera un personaje de Albert Camus, a un lugar devastado y al que debe, con su injerencia, devolverle la vitalidad rápidamente. La avant que menciona el título es la reaparición del ballet, que supo de glorias en otro momento, y que, en decadencia ahora, intenta mantenerse estoico ante cualquier embate. La radiografía exacta de los ensayos, la mirada sobre Bocca, el dinamismo de un relato que suma a la discusión sobre la cultura en los países latinoamericanos, es la principal virtud de este documento fílmico.
Estampas sobre Julio Bocca y su ballet Hace ahora seis años, más precisamente en junio de 2010, y tras haberse retirado de los escenarios en una despedida multitudinaria celebrada al pie del Obelisco, Julio Bocca fue puesto al frente del Ballet Nacional del Sodre en Montevideo por designación directa del entonces presidente uruguayo, José "Pepe" Mujica. Del revolucionario crecimiento del organismo en estos años y del prestigio y la popularidad que ha sabido ganar -no sólo en su país, sino también a nivel internacional se tienen frecuentes noticias. Pero no es ese proceso que algunos definen como milagroso el propósito central de este film documental dirigido por Juan Álvarez Neme, sino el retrato conciso, meticuloso y abarcador de la labor cotidiana de todos sus protagonistas, lo que incluye no solamente a los artistas o técnicos, sino a trabajadores de todos los oficios en medio de una actividad que nunca se detiene. Así, lo que se muestra va mucho más allá de las clases y los ensayos de los bailarines o la elaboración, de ropas y decorados; hay también otros aspectos menos artísticos y más vinculados a lo administrativo o a problemas de orden práctico. En todos los casos es visible el compromiso que cada uno -costureras, limpiadoras, pintores, carpinteros, albañiles, músicos y, claro, bailarines pone en su tarea. Tal vez esté allí parte del secreto del sostenido éxito que los acompaña. Bocca puede ser -lo es, claro el nombre más convocante del "elenco", pero aquí se lo verá tantas veces en un escritorio como corrigiendo un movimiento, definiendo las características de un personaje o resolviendo problemas prácticos. El Ballet del Sodre presenta sus propias versiones de los espectáculos que ofrece, incluso los que ha llevado en giras internacionales. De ahí que el film incluya imágenes de la que los llevó en 2014 a España.
Bocca en Uruguay. Las primeras imágenes de Avant pueden llevar a algunos espectadores a una confusión involuntaria. Ese hombre sentado ahí, en una silla de plástico con rueditas, delante de una pared a medio terminar y haciendo trabajo de escritorio, ¿es realmente Julio Bocca, una de las mayores luminarias del ballet internacional? Efectivamente, lo es. Y el espacio que lo rodea, presentado velozmente en una serie de planos fijos, será su hogar durante los siguientes años. El documental del realizador uruguayo Juan Álvarez Neme –que tiene finalmente un estreno local a dos años de su circulación por festivales de cine– sigue al bailarín nacido en Munro en su reciente rol de director del Sodre, el Ballet Nacional del Uruguay, al tiempo que las obras de restauración y puesta en valor del Auditorio Nacional Adela Reta (ubicado en el mismo emplazamiento que el viejo Teatro Urquiza, inaugurado hace más de un siglo en Montevideo) dejan abierta la posibilidad de una nueva era dorada de conciertos y presentaciones de su cuerpo estable de bailarines. El proceso de rodaje encarado por Álvarez Neme es del tipo observacional y convoca el recuerdo de La danse, el documental sobre el Ballet de la Ópera de París de Frederick Wiseman. Aunque aquí, necesariamente, la escala humana, edilicia y operacional es menor, los esfuerzos de los profesionales de la danza, su director, los operarios, las mujeres de la limpieza y demás empleados del establecimiento son equiparables en un ciento por ciento. Con un aditivo extra: no se trata de sostener un estándar de calidad excelso sino de elevarlo, de llevarlo nuevamente a un nivel internacional, perdido entre presupuestos y burocracias. Esa es la tarea de Bocca, precisamente, y el film no evita registrar una de las primeras presentaciones del cuerpo de ballet en el exterior, aunque esa visita a España ocupe, quizás, poco tiempo en pantalla. Además del bailarín y coreógrafo argentino, Avant concentra gran parte de su atención en las actividades cotidianas de Rosina Gil, primera bailarina del Sodre y una de las “cien mejores del mundo”, según la revista especializada Danza Europea. Pero el verdadero interés del realizador, más allá de destacar a las figuras de renombre y de recorrer salas de ensayo y algunas presentaciones, parece ser la descripción del complejo entramado humano que hace que el lugar tenga una respiración propia. Una secuencia de planos independientes relaciona visualmente una práctica entre Gil y su partenaire, con sus múltiples giros y piruetas –siempre bajo la mirada atenta de Bocca–, con las idas y vueltas de un obrero desde y hacia la máquina hormigonera, punto de origen de los cimientos y paredes que los contienen y sostienen. Otra escena incorpora a las vestuaristas y costureras, cuya conversación de ocasión permite recorrer algunos momentos gloriosos del pasado sin necesidad de recurrir a voces en off, entrevistas o placas descriptivas. En esos momentos, en algún secreto para mantener las zapatillas blandas, en el nerviosismo antes del debut, en la ingeniería artesanal y el ingenio sin los cuales es imposible sostener un cuerpo de ballet en un país periférico, descansan las mayores virtudes de un documental atento a los detalles detrás de los carteles luminosos.
La danza del hacer La palabra francesa “avant” es utilizada en ballet para definir un movimiento que va hacia adelante, hacia la audiencia. Palabras en francés abundan en el glosario de esta disciplina. Pero tal vez sólo esta enmarque en su sentido el movimiento hacia adelante que supone la dirección de Julio Bocca en el Ballet Nacional del SODRE de Uruguay. Avant (2014) documenta eso y un poco más. Lo primero que sorprende del film es encontrar en una de las primeras imágenes a uno de los mejores bailarines clásicos del mundo detrás de un escritorio. En un principio, vemos cómo aconseja a un bailarín sobre su carrera. Pero al rato lo encontramos resolviendo un problema con la orquesta. Luego opinando sobre el uso de la escenografía. Y así. Pero aquella sorpresa se diluye rápidamente porque el espectador se pierde en ese día a día en el teatro del SODRE que muestra el documental y todo se torna natural. La labor de los bailarines, de los técnicos, de las modistas reflejan cotidianeidad, es decir, un mundo en el que se trabaja, donde se conoce gente, se viven emociones, decepciones, ilusiones. El director sigue con la cámara principalmente a Julio Bocca. Pero la compañía que dirige es la que habla por él. Lo que el espectador percibe es trabajo, nunca charlatanería. Acompañamiento a los bailarines, supervisión, preocupación por que las cosas salgan. Como si fuera una pieza más de ese gran ensamblaje. Algunas escenas otorgan pistas sobre el valor de su presencia como director en ese lugar, pero de él sólo se observa modestia. El objetivo del director Juan Álvarez Neme no es destacar a una figura sino mostrarlo a través de un reflejo, ese reflejo es el crecimiento artístico y la repercusión que adquirió la compañía tanto en Uruguay como en el mundo a partir de su gestión desde el año 2010. La cámara del director no necesita subrayar nada, porque intenta acompañar, sin invadir. Sin embargo, los sentidos surgen. Así es que de a poco se trasluce el contraste entre el detrás de escena y el espectáculo. El ballet es la danza de lo etéreo, donde los cuerpos vuelan, se alivianan, giran casi naturalmente y todos los bailarines juntos devuelven al público la magia de esa ilusión. Sin embargo, detrás de eso hay cuerpos cansados, peinados que molestan, zapatos que aprietan, problemas sindicales, temas presupuestarios. Lograr la invisibilidad de esa inquietante trastienda a la hora de vender entradas pero también conseguir su buen funcionamiento no es una tarea sencilla. Y aquí se entiende por qué. Documentales como Avant permiten que el espectador conozca otra faceta del mundo del arte. Aquella que por ahí apaga un poco la magia, pero que es la responsable de que esa magia suceda.
JULIO BOCCA Y SU NUEVO BALLET Un muy interesante documental que nos permite conocer como fue la llegada del consagrado Julio Bocca a la dirección del ballet del Sodre en Montevideo. Una estrella internacional que se retira y se impone como desafío transformar el cuerpo de baile en un nivel internacional. Y además en paralelo se muestran como se reconstruye el lugar con distintos gremios, los técnicos, los músicos, las encargadas de limpieza, los nervios de la gira española, el debut de la primera vez. Muy interesante, aunque nos deja con ganas de haber visto mas a Julio Bocca que se dejo filmar en conversaciones con bailarines, en su cuidado de detalles, en sus concejos, en la intimidad de su nuevo rol. Pero vale.
El gran bailarín argentino Julio Bocca ceba mate desde el termo en una oficina de paredes descascaradas. No es el hombre de malla que volaba con Don Quijote, sino el director del ballet del Sodre, en Uruguay. Un universo con rutinas que incluyen maravillosos ensayos, conflictos gremiales, orquestas que se niegan a tocar y funcionarios públicos que ejecutan una burocracia gris. Avant muestra ese cotidiano, rico y curioso, en el que lo artístico debe negociar, día a día, con los más terrenales y pueriles de los problemas. Curiosamente, esa mirada del backstage, de bambalinas, en la que los bailarines son trabajadores que se esfuerzan y se preocupan por el cuerpo y el paso del tiempo, no echa por tierra la belleza del ballet, sino todo lo contrario. Con un trabajo de encuadres que saca provecho de los lugares, como la bella sala Adela Reta de Montevideo, y una observación sutil de gestos, movimientos y gentes, Avant es un muy buen documental sobre Bocca pero también más: una mirada aguda sobre la creación artística sin adornos.
EL LABERINTO DE LAS IDEAS PERDIDAS Este documental del director uruguayo Juan Álvarez Neme cuenta la cotidianeidad de Julio Bocca a cargo del Ballet Nacional de Sodre (Servicio Oficial de Difusión, Radiotelevisión y Espectáculos de Montevideo). Al mismo tiempo en el que Bocca asciende y entrena a su equipo de baile, el teatro donde funciona esa compañía se está reconstruyendo, después de años de abandono. El documental muestra el trabajo diario en todos sus acepciones: el mundo del ballet y su duro entrenamiento; el mundo de la reconstrucción del edificio con sus obreros y sus cementos y sus pinturas, la limpieza del mismo con sus abocadas mujeres que lustran y lustran las barandas; los vigilantes que permanecen en la entrada, el afinador de pianos. En un intento por equiparar los oficios (bailarín, obrero, policía, etc) Avant propone una pregunta interesante acerca del mundo de lo laboral y ése que hace su centro en la cultura. Lamentablemente se queda ahí y no avanza en la idea que solo propone de manera tenue. La burocracia y el dinero en forma de salario también forman parte de las preocupaciones del director del teatro y del mismo Julio Bocca. Que la orquesta sea un organismo oficial supone que debe cumplir un horario de personal administrativo estatal y eso complica los ensayos del ballet. Que los bailarines deban cobrar por su trabajo también es una preocupación de los directores. La cultura, a veces, siempre, se ve cruzada por el mercado, por el dinero y esto suele ser un inconveniente a la hora del trabajo cotidiano. El poder siempre es un problema, saber quién lo tiene es aún más problemático. Avant propone ideas interesantes pero se queda en extensas secuencias del entrenamiento de los bailarines. Incluso suele ser confuso cuando Bocca aparece en Madrid con su compañía. La narrativa del documental es poco precisa sobre todo en su línea temporal, lo que hace que el espectador se pierda en los laberintos de ese teatro abandonado. AVANT, LA CONSTRUCCIÓN DE UN BALLET Avant, la construcción de un ballet. Argentina/Uruguay, 2014. Dirección, guión, fotografía y edición: Juan Álvarez Neme. Intérpretes: Julio Bocca y el Ballet Nacional del Sodre (Servicio Oficial de Difusión, Radiotelevisión y Espectáculos) del Uruguay. Duración: 98 minutos.
No se si muchos saben que Julio Bocca es el director del Ballet Nacional del Sodre, en Uruguay. Uno de los tres mejores bailarines argetinos de la historia (junto con Jorge Donn y Maximiliano Guerra, por supuesto) trabaja desde el 2010 en la vecina orilla. Allí, se dedica a la docencia y la organización de la vida de una compañía especial para él. Luego de dejar la danza, Bocca buscó nuevos aires para mantener su pasión encendida. Así es que aquí encontró su lugar en el mundo. Organiza las giras, elige las obras, marca los recorridos locales e internacionales. Es un artista organizadoy metódico que sigue generando proyectos en forma permanente (la pregunta, para el público argentino es obvia... ¿Por qué no pudo hacerlo aquí?) y lo cierto es que viene produciendo una revolución del ballet en la vecina orilla. "Avant" es el recorrido de reconfiguración de un hombre tratando de generar un cambio. El Ballet Nacional de Montevideo estaba bastante lejos del favor del público y Bocca se propuso como desafío, poner en riesgo su reputación y procurar un cambio radical, para ponerlo en un nivel, que nunca antes había tenido. El uruguayo Juan Alvarez Neme se encarga de seguir este proceso, con una cámara que registra y no pregunta. Este es un doc de observación. Veremos como se va armado la compañia desde sus detalles más pequeños y la relación que Bocca va generando con sus dirigidos desde el principio. Hay alguna cuestión puntual muy interesante de ver (los contrapuntos del famoso bailarín con su ballet, los conflictos con los técnicos y músicos, etc...), pero no hay que olvidarse que la idea es ser partícipes silenciosos, sin interferir en esta construcción. Es bueno ver a Bocca en acción. Verlo trabajar, electriza el aire. Es cierto que la construcción del espacio físico (la escenografía) y el entrenamiento físico "real", se lleva bastante metraje del film, pero aún así en "Avant" hay segmentos bellos que impactan y le da al registro, una sustancia intensa y física. Y vuelvo a pensar en Julio...¿Por qué no trabaja en Argentina? "Avant" es un film correcto donde la premisa es acompañar un proceso, difícil, complejo, de reconstrucción de un ballet y que también nos habla del valor de transmitir la experiencia y ser firme en las convicciones.
Bocca funcionario Este documental muestra un costado desconocido del gran bailarín argentino, y retrata con sensibilidad al Ballet del SODRE. En 2007, Julio Bocca se despidió de los escenarios, pero no de la danza: tres años más tarde asumió como director del Ballet Nacional del SODRE, la compañía estatal del Uruguay, país en el que está radicado desde 2008. Un par de presentaciones en el Teatro Colón mostraron algo del buen trabajo que viene desarrollando con ese cuerpo de baile, pero poco se sabe por aquí de la tarea que día a día cumple puertas adentro de esa emblemática institución. El uruguayo Juan Alvarez Neme filmó a la compañía durante un año y medio y el resultado es Avant, un retrato tanto del Bocca funcionario como de la entidad y su revitalizado ballet. Es un documental de observación, sin entrevistas ni testimonios a cámara, que tiene el mérito de abarcar no sólo el aspecto más expuesto del trabajo de Bocca, el artístico, sino también el menos visible -y, probablemente, el menos grato-: el burocrático. Así, lo vemos irreconocible, sentado en un escritorio, en un despacho descascarado, con la computadora y el mate como compañía, casi como un oficinista más; haciéndoles firmar contratos a bailarinas, a la par que, paternalmente, las aconseja; lidiando con problemas institucionales, como la negativa de la orquesta a cambiar el horario de los ensayos o un paro del personal técnico. La figura de Bocca es central, pero no acapara toda la película. También se ven los ensayos de la compañía, en Montevideo y de gira, y el trabajo cotidiano de operarios, ordenanzas y albañiles para el mantenimiento y puesta en valor del edificio del SODRE. Son tomas de gran sensibilidad, que pintan el espíritu de la institución, pero a veces se prolongan demasiado y cargan al documental de cierta morosidad, desdibujando el interés que ciertamente tiene. Y que quizá podría haberse potenciado incluyendo algunos datos básicos para principiantes, como que el Ballet Nacional del SODRE (siglas de Servicio Oficial de Difusión Radio Eléctrica) tiene 80 años de rica historia, pero entró en declive a partir del incendio que en 1971 destruyó su vieja sede, hogar que recién recuperó en 2009. Bocca fue convocado por el entonces presidente Mujica como parte de un plan de recuperación que, por lo visto en Avant, está dando resultado.
Fue filmada dentro del Auditorio y espacios del Sodre (Servicio Oficial de Difusión, Radiotelevisión y Espectáculos) en Montevideo, con la excepción de la primer gira internacional de la era Bocca donde acompañó al ballet en algunas presentaciones en España. Muestra lo cotidiano, el arte de esta compañía y describe a cada uno de los integrantes que la componen.
De cómo Julio Bocca afianzó al Sodre Allá por 2010, Julio Bocca se despidió de los escenarios como bailarín y empezó a probarse como director del Sodre, el Ballet Nacional del Uruguay, que por aquel entonces estaba de capa caída. Reanimarlo fue un largo y paciente trabajo. Había gente ansiosa de participar en esa nueva etapa, y también mucha gente habituada a imponer el peso de la burocracia frente al más mínimo intento de hacer algo. Digamos que ése es un defecto en ambas orillas. El documental que ahora vemos se autodefine como "un retrato del cambio". Más bien es una serie de viñetas algo deshilvanadas, que registran la lucha cotidiana del artista sentado frente al escritorio y de pie junto a la barra, así como la parsimoniosa rutina de una empleada en la escalera, el eterno trabajo de unos albañiles, los ensayos, la alegría de ver que alguien entendió en forma inmediata y perfecta una indicación, los encuentros con el público, la creación de nuevos públicos, las giras iniciales, etc. Adherido a la moda del "documental de observación" (es decir, privado de comentarios y explicaciones), el resultado no será como "La danse", de Fred Wiseman, con el Ballet de la Ópera de París, pero tiene su buen mérito. Gracias a él, ahora podemos apreciar debidamente el esfuerzo de Julio Bocca, sus bailarines y asistentes, su entusiasmo y sus primeros frutos. Director, libretista y camarógrafo, Juan Álvarez Neme, firme en el Auditorio y los espacios del Sodre a lo largo de los dos primeros años. Coproductores, Tarkio Films, oriental, y Trivial Media, de la Argentina.
Tracción a baile Sin dejar de ser atractiva, la premisa de este documental observacional del realizador Juan Álvarez Neme, que se estrena con dos años de atraso, el resultado final no es demasiado alentador para un espectador que vaya a buscar en Avant… (2014) la belleza del ballet, de las coreografías o de la presencia de Julio Bocca en otro rol al que se está acostumbrado. El montaje que acumula imágenes de la cotidianeidad de un día de jornada laboral en el Auditorio Nacional Adela Reta, espacio que tras la gestión de Julio Bocca a cargo del Ballet Nacional del Uruguay, recuperó el prestigio perdido, intenta establecer un paralelismo con los ensayos en vísperas a la primera gira por españa, donde el SODRE se presentó.