This is the end...
Luego de una impaciente espera luego del final "abierto" en Avengers: Infinity War ha llegado su secuela Avengers: Endgame, el desenlace del conflicto universal planteado por el villano extraterrestre Thanos. Con esta película llega el final de la saga o al menos de una generación tal como se la conoce tan aclamada por sus múltiples fanáticos.
Por Denise Pieniazek
“Of our elaborate plans, the end
Of everything that stands, the end
No safety or surprise, the end
I'll never look into your eyes again”
The end, The Doors.
La película Avengers: Endgame (2019), es la cuarta entrega de la saga, que a su vez vendría a ser la segunda parte de Avengers: Infinity War (2018). Repasemos brevemente, ésta es la película número veintidós dentro del Universo Cinematógrafico de Marvel (MCU), el cual comenzó en el 2008 con la primera entrega individual de Iron Man, uno de los personajes más queridos por el público.
Desde el comienzo debemos destacar con honestidad que el MCU ha sido sumamente ingenioso por conectar tanto los filmes corales de Avengers como los de los superhéroes protagónicos (en sus películas individuales), en historias paralelas con puntos de cruce que a su vez respetan sus temporalidades. Este siempre ha sido un acierto de la saga, el de unir todo como un gran rompecabezas que ha sabido generar gran fanatismo en el público actual, sobre todo en los jóvenes, volviéndose así una industria cultural sobre sí misma.
Avengers: Endgame inicia con un prólogo que muestra al personaje de Hawkeye, quien se había retirado de las batallas, justo en momento de conflicto con el que finalizaba Avengers: Infinity War. Luego veremos a los Avengers que han sobrevivido a esa batalla, con un salto temporal posterior que será el inicio de la acción propiamente dicha. El equipo conformado por Iron Man, Capitan América, Black Widow, Capitana Marvel, Hawkeye, Ant Man, Hulk, Thor, Nebula y el pequeño mapache Rocket, será el encargado de hacer avanzar la acción e idear un plan posible de revertir el daño causado por el villano Thanos en la entrega anterior, al obtener las seis gemas del infinito.
Mediante el trillado recurso del viaje en el tiempo, predecible pero bien empleado en esta ocasión (incluso se mencionan y burlan a otras películas de la cultura popular que tratan dicha cuestión) este equipo de superhéroes se divide para viajar en el tiempo a varios puntos específicos que se conectan entre sí -sobre todo refiriendo a la primera entrega de la sagaThe Avengers, 2012- para proteger las piedras preciosas, que recordemos remiten a seis aspectos distintos de la existencia.
En esta odisea con vaivenes temporales, algunos de los superhéroes estarán duplicados debido al paralelismo temporal, produciendo efectos de comicidad que distienden una trama, que es psicológicamente más profunda que en otras entregas. Ante la pérdida de varios seres queridos en la película anterior, ahora los superhéroes más que motivaciones heroicas o narcisistas poseen motivaciones sentimentales, de tal índole que algunos de ellos harán grandes sacrificios.
A pesar de la extensa duración de tres horas que posee Avengers: Endgame, ésta resulta muy entretenida y dinámica, manteniendo intrigado al espectador sin volverse densa. Sin embargo, se considera que algunas cuestiones de su resolución y selección del tiempo presente del relato en su desenlace no terminan de encajar de forma armónica. Es decir, que quedan algunos pequeños cabos sueltos o detalles para el espectador más puntilloso, a pesar de ello el relato funciona y se sostiene dentro de su propia lógica.
Mientras en entregas anteriores el esquema era reiterativo y poco original en su conflicto, aquí, aunque ese modelo general sigue presente, es utilizado de forma más audaz y es necesario debido al acierto de dividir este conflicto en dos filmes. En consecuencia, un elenco coral y su desenlace en apoteosis, si bien es exagerado y grandilocuente, tiene sentido dentro de su lógica descomunal de una guerra de las galaxias, además de otorgar a los expectantes fans lo que desean, compilando la esencia de varios años compuestos por tantos filmes.
Si nos detenemos a analizar desde la simbología del color los posters de Avengers: Infinity War y su continuación Avengers: Endgame encontramos este desenlace descifrando sus tonalidades: mientras que en el primer afiche hay un predominio de la tonalidad cálida y rojiza, la cual simboliza el peligro, el estado de alerta, en el segundo predomina el azul, representando la armonía y la calma.
Por lo tanto, Avengers: Endgame es la clausura de esta saga, pero no de este universo cinematográfico que seguramente encontrará la forma de seguir explotando esta industrial cultural masiva. Generalmente los comics aparecieron en periodos de guerra o crisis sociales, habría que preguntarse ¿por qué en este siglo las películas de superhéroes vuelven a tener semejante relevancia en el público?
En conclusión, si bien no es una eclosión de originalidad Avengers: Endgame es entretenida y emotiva. Es el final de una generación de Avengers tal como los conocemos, y aunque no hay escenas extras como nos tiene acostumbrados el MCU, es posible el traspaso a una nueva generación de Avengers, no sólo más jóvenes, sino en donde otros aspectos de la sociedad actual se hacen latentes como las diferencias étnicas, raciales y de género.