Once años pasaron desde el estreno de Iron Man con Robert Downey Jr. Veinte películas dentro del universo de Marvel. Estos son datos y son necesarios para empatizar y entender Avengers: Endgame.
Es claro que Avengers: Endgame, en sí misma y por sí sola, no podría funcionar. Necesita de todo lo dicho anteriormente para tener un contexto, por lo cual no haber visto nada del universo Marvel antes de esta película hará que el espectador se quede completamente afuera y si por casualidad no vieron alguna de las anteriores, claro está que a más de una cosa no le encontrarán sentido o empatía.
Trataré en las próximas líneas de no revelar demasiado, pero de todas formas es algo difícil en una película que, todos sabemos, cierra un ciclo de historias y personajes.La duración de tres horas siempre, sea la película que sea, marca un punto. En el caso de Endgame esas horas no pesan, no cansan, son llevaderas. Sí se podrían sacar varios minutos (como unos cuarenta) pero está claro que, viendo la película, los directores no querían dejar nada (ni a nadie) afuera.
En relación a este punto, prácticamente, todos los personajes que aparecieron en el universo Marvel, de una u otra forma, se harán presentes para este cierre cinematográfico.
En relación a la historia, Thanos en Avengers: Infinity War chasqueó sus dedos con el guante del infinito y destruyó a la mitad de los seres vivos de la galaxia. En Avengers: Endgame los héroes que quedaron tratarán de derrotarlo y llevar adelante sus vidas.
La banda sonora es, a diferencia de películas anteriores del mismo universo, mucho más sutil, con un trazo más fino, potenciando algunas escenas.
Avengers: Endgame tiene sus fallas, tiene sus chistes forzados, tiene una duración mayor a la habitual. No es una gran película. Pero los hermanos Russo, sus directores, no pretendían que este fuera un gran film, o por lo menos eso creo yo.