Aves de presa (y la fantabulosa emancipación de una Harley Quinn)
Tras la mala recepción que tuvo “Escuadrón Suicida”, la película de David Ayer sobre el grupo de antihéroes conformado por Harley Quinn, Deadshot, Killer Croc, El Diablo, Enchantress, entre otros, Warner decidió comenzar de cero con este spin-off dándole total protagonismo al personaje interpretado por Margot Robbie, que por lejos fue el que mejor había funcionado.
De esta manera, con Cathy Yan, nueva directora detrás del proyecto, y otra historia, “emanciparon” a Harley Quinn de lo que fue “Escuadrón Suicida” y una buena manera de este fresh start era terminar su relación amorosa con el Joker (el de Jard Leto, no el de Joaquin Phoenix). Y lamentablemente en eso se queda “Aves de Presa”, en buenas ideas.
Tras su ruptura con el Príncipe Payaso del Crimen, Harley pierde su inmunidad frente a otros grupos mafiosos de Ciudad Gótica así como de la Policía. Al mismo tiempo, uno de los villanos más poderosos y narcisista, Roman Sionis (alias Máscara Negra), busca a una pequeña ratera llamada Cassandra Cain, quien le ha robado una preciada joya que aumentaría aún más su influencia en la ciudad. Sionis hace un trato con Harley, y a través de esta tarea su camino se cruzará con el de Cazadora, Canario Negro y la oficial Renée Montoya.
El guión, con una historia sencilla y de baja calidad, busca que el espectador disfrute especialmente las escenas de acción, bien coreografeadas y con mayoría de planos cortos. El problema radica en lo que queda entre que termina una pelea y esperamos por la próxima. La historia está desordenada y se mueve con un ritmo frenético, siendo un fiel reflejo de la personalidad y manera de ser de Harley Quinn, y es contada a través de una voz en off de la protagonista, quien rompe en varias ocasiones la cuarta pared, al mejor estilo Deadpool -que dicho sea de paso tienen similitudes en la forma-.
La directora Yan sabe bien como trasladar la forma de ser de Harley en imágenes, ayudada por una “fantabulosa” Margot Robbie quien vuelve realizar una actuación destacable en el papel de esta antiheroína, eclipsando al resto de los personajes. Quien tiene momentos para lucirse es Ewan McGregor, componiendo un villano divertido y enfermizo, rozando la caricatura.
La fotografía, iluminación, el uso de los colores, además de la musicalización -con una estética más noventosa-, es otro de los aspectos que “Aves de Presa” busca destacar, como parte de su identidad, pero que al igual que la trama terminan cansando, independientemente de algunas escenas bien logradas. Siendo un poco mejor a “Escuadrón Suicida”, vale la pena decir que quizás la mejor opción habría sido una película en solitario de Harley Quinn.
Por Federico Perez Vecchio
Puntaje: 6/10