Divertida y cargada de acción comiquera, Aves de Presa se consolida como una de las películas más concisas de todo lo que ha propuesto DC en el último tiempo. Un gran labor de su directora y guionista, y un compromiso de parte de su elenco para con los personajes que se nota desde el primer momento son las claves principales para que ésta película funcione de manera correcta.
Después del estrepitoso fracaso en críticas que sufriera Escuadrón Suicida (Suicide Squad, 2016) habían contados elementos de los que DC y Warner podrían aferrarse para continuar expandiendo su basto universo de personajes e historias. Uno de ellos fue la primera participación live action de la doctora Harleen Quinzel o mejor conocida como Harley Quinn. La siempre fiel acompañante del Joker tuvo una primera adaptación que despertó el interés del público a tal punto que desde esa explosión viral hace ya cuatro años, lo más normal es que en cualquier convención de cultura pop o fiesta de disfraces particular haya un disfraz de ella. Pero claro que para que el personaje tuviese tanta buena aceptación fue clave la actuación de Margot Robbie ya que la actriz desde el primer momento se involucró de lleno en el desarrollo del personaje y en varias oportunidades ella se ha manifestado declarando un amor por Harley. Pero claro, a pesar de recaudar millones en taquilla, a la película le fue muy mal en críticas y por eso era muy poco probable que volviésemos a verla en la gran pantalla por lo menos por un buen tiempo.
Con decisiones editoriales en el medio y cambios en cuanto a la dirección del Universo DC y teniendo en cuenta que el personaje de Margot continuó siendo furor, una nueva oportunidad de ver a Harley Quinn se presentó y es por eso que ahora llega a los cines de todo el mundo Birds of Prey (and the Fantabulous Emancipation of One Harley Quinn). De la mano de Cathy Yan en la dirección y con un guion escrito por Christina Hodson, esta nueva aventura cuenta que fue lo que pasó con Harley Quinn (Robbie) luego de que el Joker se haya escapado con ella al final de los sucesos vistos en Escuadrón Suicida, pero lejos de toda la felicidad que en ese momento Harley creía tener, ella ahora estará separada para siempre del Payaso del Crimen y estará en la búsqueda de seguir sosteniendo su ritmo y estilo de vida pero ahora sin las ventajas que antes tenía con el Guasón. En este camino que ahora le toca transitar Harley terminará reunida con un grupo de mujeres compuesto por Helena Bertinelli/Huntress (Mary Elizabeth Winstead), Dinah Lance/Black Canary (Jurnee Smollett-Bell), la detective Renee Montoya (Rosie Perez) y Cassandra Cain (Ella Jay Basco), que en una primera instancia no tienen mucho que ver una con la otra salvo por un enemigo en común: Roman Sionis/Black Mask (Ewan McGregor) un empresario del bajo mundo de Gotham que por diferentes razones termina provocando el enfado de estas mujeres que buscarán acabar con él usando todos los recursos que tienen a su alcance, incluso la estrafalaria y particular locura de Harley Quinn.
Partiendo de la base de que ésta película podría funcionar como secuela o spin-off del Suicide Squad eran lógicas las dudas que se podían tener en cuanto a su calidad como producto cinematográfico. Sin embargo una vez más el cine da muestras de que los prejuicios, por más razones que el público pueda llegar a tener, pueden ser refutados en apenas 110 minutos de material. Si bien la película comienza de manera tambaleante en cuanto a modo de narrar la historia, esas maneras se van aclarando con tal avanza el relato y una vez que se logran establecer todas las líneas temporales, juega mucho con el flashback, la historia propiamente dicha se aclara y deja el camino preparado para los eventos que realmente valen la pena ver. El guion con el que cuenta la película tiene como detalle particular que juega permanentemente con el espectador rompiendo la cuarta pared de una forma en la que no se lo nota pesada ni mucho menos aburrida. Como para poner un ejemplo, es lo más cercano que una película ha logrado estar a Deadpool (2016), ya que no sólo en la metatextualidad está su punto más alto sino también en el aspecto humorístico y en lo que a violencia explícita se puede considerar tomando todos los riesgos necesarios como para impactar al espectador creando escenas memorables. A pesar de que la historia per se no contenga una gran cantidad de giros o una complejidad demasiado desarrollada, los caminos que son utilizados ayudan a reemplazar esa falta de contenido y metiendo desarrollo de personajes secundarios como para balancear esa falta de historia con la necesidad de presentar todos personajes nuevos.
Más por el lado de la dirección muchas críticas había recibido la directora con respecto a las escenas de acción, la mayoría utilizando el prejuicio de “las directoras no saben hacer películas de acción” y la verdad es que con la ayuda del director de John Wick para pulir todas las coreografías ya planteadas lograron concretar peleas que están a la altura de lo que una película de acción y comiquera requiere. Al mismo tiempo el ambiente que se logra generar gracias al buen uso de la fotografía, resaltando los colores y la oscuridad cuando es debido, y a la elección de temas musicales, aspecto que un poco se asemeja al de su predecesora, crean una experiencia disfrutable en todo momento del metraje.
En cuanto a las actuaciones ya no hay discución con lo que Margot Robbie puede hacer gracias a su versatilidad como actriz y también por el cariño notorio que tiene para con el personaje y esa “relación” puede notarse desde el primer fotograma en el que aparece consolidando para ella una brillante nueva interpretación. Si bien el resto del elenco cumple con creces, a ninguna de las “Aves” se le puede reprochar nada ninguna logra destacarse por sobre el resto. El que si logra destacarse es Ewan McGregor en su rol de villano y aprovecha su oportunidad para pisar fuerte en el mundo comiquero. Él logra dar una gran interpretación de un personaje que no había sido encarado antes en cines y lo mismo en cuanto a lo que su personaje realiza, ya que las motivaciones de Black Mask son más “simples y cotidianas” que otros villanos pudiesen tener. Ese es un aspecto que las películas de DC, en el último tiempo, no habían abordado y en esta ocasión fue aprovechada al máximo.
Aves de Presa llega como la primera película comiquera protagonizada por un grupo de mujeres y logró funcionar de una manera impecable pese a la simpleza de lo que la trama propone. Los caminos que utiliza su directora, el guion que aprovecha lo que tiene al máximo y una más que satisfactoria labor de sus intérpretes consolidan a ésta película como una de las más estables y concisas del Universo DC.