Elenco de lujo para un film adorable
Bajo un mismo cielo (Aloha en el título original) viene marcada desde afuera. Primero un guión que estaba escrito para otros actores y que fue alterado para adaptarlo a los nuevos.
Bajo un mismo cielo (Aloha en el título original) viene marcada desde afuera. Primero un guión que estaba escrito para otros actores y que fue alterado para adaptarlo a los nuevos. Luego la filtración de mails de ejecutivos del estudio que hablaban de forma despectiva de la película. Para peor, una protesta de los habitantes de Hawaii acusando al film de haber elegido a una actriz blanca (Emma Stone) para interpretar a una hija de nativos y finalmente, claro, muchas pero muchas críticas en contra de la prensa. Aunque no hay duda de que toda crítica es válida siempre que sea honesta, a veces las olas negativas se expanden y no deban ver con claridad. Bajo un mismo cielo es una película adorable, algo alocada y definitivamente imperfecta para los cánones industriales. Pero es una película más estimulante e interesante que muchas otras que gozan del favor de la crítica, el público, los grupos que protestan y los ejecutivos de los estudios. Brian Gilcrest (Cooper) es un reconocido ingeniero militar que regresa al lugar de sus mayores logros y allí se encuentra con un viejo amor (Rachel McAdams) a la vez que se interesa por una militar que le asignan para que lo vigile (Emma Stone). La película apuesta a lo grande en lo que a tonos y temas refiere y en el caos encuentra su propia reflexión sobre la vida. Si Cameron Crowe siempre se destacó en la elección de los actores, acá hay que decir que el casting es absolutamente irresistible: Bradley Cooper, Emma Stone, Rachel McAdams, Bill Murray, Alec Baldwin, John Krasinski, son un verdadero seleccionado de carisma. También Crowe (director de Jerry McGuire) vuelve a destacarse a la hora de armar la banda de sonido. Canciones y ritmos propios de Hawaii se combinan con una espectacular combinación de grandes temas de Beck, The Rolling Stones, David Bowie y The Who, entre otros. Fácil de disfrutar y de querer, Bajo un mismo cielo parece una excepción a los códigos del cine actual, y como tal, no es raro que sea mirada como un objeto extraño. Es el trabajo del crítico ver que esa rareza es personalidad y riesgo, dos buena características para hacer cine.