Es una historia de amor entre dos adolescentes enfermos de cáncer. Pero aunque llena de clichés y lacrimógena sin remedio, también es una honesta manera de presentar una relación que florece a pesar de todo, con dos protagonistas que nunca ignoran lo que les pasa y son sinceros hasta la crueldad. También está la chica del momento Shailene Woodley (“Divergente” y “Los descendientes”). Con todos los reparos.