Llega de la mano del director Seth Gordon (Quiero matar a mi jefe y Ladrona de identidades). Es divertida, hay luchas, explosiones y persecuciones, su humor resulta escatológico y habla del despertar sexual. Se pueden ver varios villanos como Priyanka Chopra; un personaje gracioso, el bonachón y torpe Jon Bass; dentro de las mujeres atractivas: la actriz, modelo y la ex de Leonardo Di Caprio, Kelly Rohrbach (interpreta a C.J. Parker que en los noventa era Pamela Anderson), Alexandra Daddario y Ilfenesh Hadera; sabe ofrecer los que público quiere siempre el rudo de Dwayne Johnson (es Mitch Buchannon) y Zac Efron, simpático, vanidoso, ególatra, un ex campeón olímpico de natación y hasta se viste de mujer resulta cómico. Se utiliza la cámara lenta, buena música y fotografía. Es puro entretenimiento, para disfrutar y tenes que saber entrar en el juego. Están los cameos de la clásica serie los guardavidas de la bahía californiana, luego fue hawaiana: David Hasselhoff quien fue en la serie Mitch Buchannon y Pamela Anderson, en otros. Tuvieron un presupuesto de 69 millones de dólares y dentro de los créditos finales hay escenas extras.