Año 2049. El empresario Wallace logró salvar al mundo de la hambruna y el colapso económico, y en el camino creó una nueva generación de replicantes más dóciles. Pero aún existen antiguos Nexus que pueden revelarse, y es por ésto que siguen existiendo los Blade Runner para cazarlos.
Luego de un tiempo de espera con respecto a otros países, nos llega uno de los films más esperados del año, Blade Runner 2049, con una ola de críticas positivas que la ponían a priori como una de las mejores películas de la década. La duda es entonces, si este film es para tanto o no.
Podemos decir que en algunos apartados lo es. La dirección de Dennis Villeneuve es asombrosa, y por varios tramos logra superar a lo realizado por Ridley Scott en la película original. El uso de las luces y la estética implementada, nos muestra un mundo mucho más decadente que el visto en 1982. Sin dudas, después de Blade Runner 2049, Villeneuve debería ser considerado uno de los mejores directores de la década.
El otro apartado que hace tan superior a esta cinta, son las actuaciones. En esta ocasión tenemos varios personajes, bastantes. Pero como la película dura más de dos horas y media, hay el suficiente tiempo para desarrollar estos roles; y para que sus actores se luzcan. Desde Ryan Gosling como el protagonista, hasta los personajes más secundarios, todos tienen su momento para lucirse; mostrando que Villeneuve no solo es un gran director, sino también un enorme director de actores, algo que ya había mostrado en sus anteriores trabajos.
Pero como dijimos, las dos horas cuarenta y cuatro minutos que dura Blade Runner 2049 se sienten. Y no solo eso, algunos tramos podrían sacarse para reducir metraje, y el film seguiría funcionando igual; haciendo que no estemos ante esa película tan perfecta que se nos dijo.
De todas formas Blade Runner 2049 es una enorme cinta, quizás una de las mejores del año; pero por sobre todo, estamos al fin ante una de esas secuelas tardías, que si aportan al universo creado originalmente, y que está a la altura del mito. Para ver si o si en los cines.