En 1982 se estrenó un film que marcaría un antes y un después en la historia del cine de ciencia ficción, una obra maestra cinematográfica. Blade Runner fue la adaptación de “Do Androids Dream of Electric Sheep?” (1968) y, tal como lo hacía el gran escritor del género Philip K. Dick, la película jugaba con la idea de la realidad. ¿Cómo saber si somos reales? ¿Cómo saber si nuestros recuerdos son verdaderos? Y por último el gran interrogante: ¿Es Rick Deckard, el protagonista, un replicante?. 35 años después, Ridley Scott vuelve al mundo cyberpunk del mencionado autor pero en calidad de productor, dejando la posta de director en manos de uno de los grandes talentos del momento en Hollywood, Denis Villeneuve (Sicario, Arrival). Junto a Ryan Gosling como el nuevo blade runner y al regreso de Harrison Ford, esta secuela llega para sumergirnos en un mar de inquietudes y crímenes en un mundo donde la línea que separa a los humanos de los replicantes es cada vez más difusa.