Esta semana nos llega otro estreno en digital, de la mano de la conocida directora francesa Anne Fontaine («Les Innocentes», «Perfect Mothers»), con Isabelle Huppert en un rol secundario.
«Blanca Como la Nieve» es una comedia negra con tintes de thriller que está basada Blancanieves, el reconocido cuento de los hermanos Grimm. Un relato atractivo que tiene interesantes y elocuentes pasajes a pesar de que su narrativa puede llegar a ser, por momentos, un poco inconsistente.
El largometraje cuenta la historia de Claire (Lou de Laâge), una bella joven trabaja en el hotel de su difunto padre, que ahora dirige su «malvada madrastra» Maud (Isabelle Huppert). Un día la joven es secuestrada y metida en el baúl de un auto, pero el vehículo termina chocando, pudiendo liberarse de su secuestradora. La joven es socorrida por un aldeano que vive en una granja aledaña y lejos de apresurarse por volver a su vida, termina quedándose con este hombre, su hermano gemelo y un músico que es inquilino de ambos.
De esta forma, la joven inicia un viaje de autodescubrimiento dejando atrás a su estricta madrastra, un trabajo que no desea y teniendo la oportunidad de conocer gente nueva. Claire conocerá a 7 hombres distintos, como pasa en el cuento de los hermanos Grimm pero gradualmente, que de alguna forma la ayudarán con sus problemas, iniciando un camino hacia la liberación y el despertar.
Lo interesante del film es que comienza con un ritmo bastante ligero cuasi de thriller y luego va virando hacia un terreno más tranquilo, pero sin perder el suspenso entre la situación del secuestro y lo que le depara en el futuro a la joven. Esta atmósfera de extrañamiento e intriga se teje gracias a una estructura no cronológica de los hechos a fines puramente dramáticos donde poco a poco se van develando los responsables de ciertas acciones.
Un relato interesante que funciona gracias a las buenas interpretaciones de Laâge y Huppert y que se beneficia de ese tono sardónico característico de la comedia negra. Quizás, por instantes la cinta tambalee en relación al tono que intenta mantener que a veces apunta a lo irreverente ateniéndose al cuento en el que se inspira y por momentos tomándose bastante en serio como dar justo en la tecla de lo que intenta lograr.
No obstante, «Blanca Como la Nieve» es una película correcta que se beneficia de su trama y estructura poco convencional para llevar aquel viejo relato a la época moderna y mostrarnos la liberación de esta joven de todo aquello que la retiene y no la permite continuar.