Border: Ajena al hombre.
Suecia nos trae este peculiar, bello e intrigante film que indaga en el costado animal del ser humano, la búsqueda de identidad y las relaciones afectivas. Todo esto reunido en un drama potente con tintes fantásticos.
Border resultó ser una de las gratas sorpresas de 2018. Una película que cosechó el elogio tanto de la crítica como del público y que obtuvo varios reconocimientos entre los que se destacan la nominación al Oscar a Mejor Maquillaje y el galardón en el prestigioso Festival de Cannes en el marco de Un Certain Regard, donde cada año se presentan una serie de películas con diferentes tipos de visiones y estilos; obras “originales y diferentes” que buscan el reconocimiento internacional. El largometraje fue dirigido por Ali Abbasi (Shelley) y está basado en una historia corta escrita por Ajvide Lindqvist, autor de la novela de vampiros titulada Let The Right One In, la cual también fue exitosamente adaptada en un largometraje de origen sueco y en una posterior remake norteamericana.
La película cuenta la historia de Tina (Eva Melander), una agente de aduanas reconocida por su eficiencia y su peculiar habilidad, la cual consiste en poder reconocer e identificar la culpabilidad de un individuo por medio de su potenciado sentido del olfato. Sin embargo, Vore, un hombre aparentemente sospechoso, pasa junto a ella y sus talentos se ponen a prueba por primera vez. Tina sabe que Vore (Eero Milonoff) oculta algo, pero no logra identificar qué es.
Lo interesante de la propuesta dirigida por el realizador de origen iraní reside en la construcción de un relato inquietante y perturbador que genera continuamente atmósferas opresivas y un clima avasallante pero al mismo tiempo seductor. El espectador se ve inmerso en una experiencia cinematográfica profunda cuyo fuerte no solo radica en el maquillaje, en el gélido trabajo de fotografía y en las poderosas actuaciones del dúo protagónico sino también en un trabajo de guion inspirado que propone un thriller con tintes de cine fantástico que teoriza sobre la búsqueda de identidad, las perversiones y el costado más primitivo del ser humano así como también en cuestiones como la venganza, la justicia por mano propia y la sexualidad.
Abassi incomoda al espectador al igual que a la misma protagonista que se encuentra en pleno proceso de búsqueda y autodescubrimiento. Resulta fascinante e hipnótico esa especie de “cuento de hadas” nórdico oscuro cuyo fuerte radica en cómo se va desarrollando la narración y en su progresiva evolución.
Border (o Gräns en su idioma original) es una propuesta atípica, extraña y sumamente atrapante que logra una correcta mixtura de géneros y un inspirado trabajo a nivel narrativo. Un film que se nutre de la fantasía para revelar, denunciar y/o exponer el lado oscuro de las sociedades modernas. Una de esas películas para descubrir, recomendar y disfrutar.