Agrada la película que inauguró el reciente Festival de Toronto
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El Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) se diferencia de sus pares de Cannes, Berlín y Venecia al ser básicamente no competitivo. Para su inauguración sus organizadores eligieron “Borg-McEnroe: la película”, tal su título local, recibiendo buenos comentarios de la crítica local e internacional.
La película no se limita a recrear la gran final de Wimbledon de 1980 en que el sueco Bjorn Borg buscaba el record de cinco victorias sucesivas en el célebre court inglés. Enfrente se encontraba John McEnroe, un joven norteamericano (aunque nacido en Alemania) de apenas 21 años.
Eran dos temperamentos absolutamente opuestos y gran parte del film muestra a ambos contendientes durante su niñez y adolescencia. Donde había mayor coincidencia era en los agotadores entrenamientos de ambos, pero una vez en pleno juego se percibían las grandes diferencias.
A Borg (Sverrir Gudnason, de gran parecido físico) se lo conocía como el hombre de hielo por su extrema frialdad, mientras que McEnroe (Shia Labeouf) era justo lo contrario, descargando su carácter latino (pese a no serlo) contra los jueces y autoridades del tenis. Interesante destacar que en el rol del sueco participaron tres actores en distintas etapa de su vida y que uno es Leo, su propio hijo.
Este cronista recuerda haber visto la final de Roland-Garros de 1975, donde Borg le ganó a Guillermo Vilas, e incluso tuvo la oportunidad de acercarse (era más fácil en esa época ingresar al final del match) y apoyar a un abatido Vilas.
El realizador Janus Metz acierta al componer en la última media hora una especie de thriller y si bien es público el resultado final del célebre match, conviene no develarlo para quien no lo conozca. No es un “spoiler” decir que Borg y McEnroe tuvieron varios “match points” antes de la definición ni tampoco que volvieron a enfrentarse un año después en otra final de Wimbledon. Tampoco que son grandes amigos hasta el día de hoy. Las escenas del encuentro de Wimbledon están excelentemente filmadas y valen por sí solas la visión de toda la película.
Señalemos de paso que en Toronto se vio otra producción sobre el deporte de Federer y Nadal. Se trata de “Battle of the Sexes”, donde se relata el desafío que enfrentó a Bobby Riggs (Steve Carell), tenista machista contra la célebre Billy Jean King (Emma Stone), quien estando casada sostuvo una relación paralela con su peluquera (Andrea Riseborough). Ambas actrices posiblemente sean nominadas, en diferentes categorías, al Oscar de interpretación femenina.