La búsqueda
Borrá todo lo que dije del amor, porque no sabía bien quién era, ópera prima de Guillermina Pico, mezcla de documental y ensayo, donde la directora abre las puertas de su mundo y entrega una obra sobre momentos de su vida con una abrumadora carga de nostalgia.
La primera película de la realizadora oriunda de La Pampa es una colección de instantes: como si se trataran de las piezas de un rompecabezas. Pico parece buscar algo en las imágenes que capta en su lugar de nacimiento, en Londres o en Buenos Aires.
Esos retazos de momentos forman el largometraje que apenas excede la hora de duración. Las secuencias, en ocasiones demasiado cortas, evidencian esa constante búsqueda en el exterior, donde la naturaleza ocupa un lugar preferencial.
En cambio, puertas adentro, la directora registra charlas familiares o por ejemplo un baile de pueblo, donde la nostalgia pasa a un primerísimo plano. El mayor acierto de Pico es transmitir ese sentimiento a través de instantes que se desarrollan frente a la cámara con total naturalidad.
Asimismo y, pese a que la duración del film es bastante acotada, hay otras escenas que no aportan nada significativo a la mencionada búsqueda y hacen que la atención lograda hasta el momento se disperse.
No obstante, Borrá todo lo que dije del amor, porque no sabía bien quién era es una propuesta distinta que merece ser experimentada y que, sin lugar a dudas, no debería pasar desapercibida.