Golpe de efecto
El documental del austríaco Jakob Weingartner se mete en el gimnasio subterráneo del andén 4 de la estación de Constitución para mostrar a las personas que día a día luchan para triunfar en el boxeo y conseguir así una mejor calidad de vida.
Boxeo Constitución (2012) sigue la historia de Federico y El Colo. El primero es un chico ex adicto a las drogas que vive con su madre y sus hermanos en un barrio del conurbano bonaerense. Su marcada desconfianza en los entrenadores hace de él una persona cautelosa tras cada paso que da en un mundo difícil. Desde el trabajo en el gimnasio hasta la visita al dentista en la Federación de Boxeo. Weingartner y su cámara nos harán testigos de su evolución hasta el tan anhelado debut. Por otro lado, El Colo quería ser estrella de rock. Un día el profesor dejó de darle clases de guitarra y se inclinó por el boxeo. Ahora trabaja como ayudante en una carnicería y asiste a su padre, un trabajador rural. Aclara que él no es violento como debería ser un boxeador.
Además otras personas darán vida a un documental que no edulcora la realidad. El director se limita a mostrar los hechos y deja entrever el difícil mundo en el que estos chicos quieren desenvolverse. Universo atractivo por las posibilidades del éxito deportivo y monetario, pero peligroso por las obvias secuelas físicas que trae aparejadas la actividad y por el aprovechamiento de ciertos individuos que ponen el acento en un negocio mal regulado.
Una y otra vez aparecerá el tren como vehículo que los transporta a ese submundo que es el gimnasio y los devuelve a sus casas en donde continúan la lucha. La banda de sonido desempeña un papel fundamental y tiene en la música de Andrés Schteingart un acompañamiento ideal. Conocido como "el Remolón", es el creador de la denominada Cumbia Digital.
En sintesís, Boxeo Constitución es una crónica de la pelea que estos chicos llevan día a día dentro y fuera del ring. Una realidad que buscan cambiar a mano limpia y que Weingartner refleja de la manera más honesta.