Apenas un acercamiento
Llamativamente parecida a Boxing Gym de Frederick Wiseman, la película de Víctor Cruz se pretende como un ensayo de observación sobre un gimnasio de Almagro: los protagonistas son cinco boxeadores, que trabajan arduamente en ese lugar. Sin embargo, debo reconocer que se me pierde esa idea de “ensayo”.
En Boxing Club no hay un trabajo de campo demasiado riguroso; en todo caso, las virtudes técnicas pretenden compensar esa falta, más desde lo visual que desde lo sonoro, donde queda la impresión de que se podría haber explotado más este último aspecto. Hay un seguimiento bastante neutro en la mirada de algunos personajes que no intenta ensalzar rasgos heroicos, sino potenciar la idea del sacrificio en condiciones precarias. Cuando los recursos son escasos, la voluntad se destaca.
En relación a este último punto, el entrenador y su persistencia parecen ser una confirmación de ello. El documental funciona por tramos: por ejemplo asoma algo de vitalidad en un breve pero desopilante diálogo sobre El padrino que se sostiene en un intervalo. Pese a todo, el film nunca despega, y ocurre algo particular: podría durar cinco minutos como seis horas.
NdR: Esta crítica es una extensión de la ya publicada durante el Festival de Mar del Plata.