Cuando tu mejor amigo es robot y extraterrestre
El spin off de "Transformers" es un film mucho más humano que los anteriores. La historia se sitúa en 1987, cuando el robot llega a la Tierra.
Travis Knight es el responsable de “Kubo y la búsqueda del samurai”, una de las mejores películas animadas de los últimos tiempos. No fue un filme muy famoso porque no perteneció a la factoría Disney/Pixar, y quizás ese semianonimato haya sido el secreto para traerlo a una franquicia tan diferente a sus demás trabajos.
La saga “Transformers” aprendió de sus errores y trae un filme mucho más humano, aunque suene contradictorio al hablar de una historia de robots extraterrestres. En “Bumblebee”, la historia se sitúa en 1987, cuando el robot llega a la Tierra. Aquí, mucho antes de ser el Camaro que se hizo conocido en 2007, primera parte de la saga, el Autobot toma la forma de un Volkswagen Escarabajo (como aparecía en los primeros juguetes y la serie original de Hasbro).
Optimus Prime envió a la Tierra a B-127, para que prepare todo para la llegada de los demás Autobots, pero queda muy averiado tras una batalla con un Decepticon que lo perseguía. De esta manera conoce a Charlie (Hailee Steinfeld), una adolescente sin amigos que conoce de reparación de autos gracias a lo que le enseñó su fallecido padre.
La joven consigue el auto, casi como chatarra, y lo hace funcionar, algo que “cura” a Bumblebee y decide presentarse con la pequeña al sentirse seguro, y se hacen amigos. Obviamente no habrá mucho tiempo de paz, y los Decepticons vendrán a buscar a B-127, ayudado por el cuerpo militar a cargo de Burns (John Cena) porque claro, no hay película de Transformers sin militares que defiendan la patria estadounidense.
El filme cambia por completo la esencia de la saga con humor e inocencia, a diferencia de todas las otras, dirigidas por Michael Bay, un cineasta virtuoso para hacer escenas de acción pero con ningún otro talento conocido. Más allá de la chatarra y la historia espacial, la amistad entre Charlie y Bumblebee hace recordar por momentos al filme animado “Big Hero 6” de 2013. Sin las peleas de robots eternas, aunque con varios momentos de acción destacables, este spin off es sin dudas la mejor de las películas de la franquicia.