Documental difícil de digerir.
Sin una estructura estrictamente establecida, el director organizó las grabaciones de lo que fué un ensayo y primeros bosquejos de lo que podría haberse convertido en un film biografico / documental sobre la fotógrafa Gabriela Liffschitz, quien dejara registrado estos encuentros antes de su muerte en el año 2004 debido a una mortal enfermedad.
El film no contó con el tiempo necesario de realización, el tomar una forma prolija debido a las imposibilidades conocidas (fue filmado durante el transcurso de su enfermedad), no obstante el resultado final del proyecto es satisfactorio, mostrar otra cara, directa, intensa, no profunda pero sí ilimitada sobre un ser humano padeciendo un cancer terminal, intentar vivir disfrutando sus ultimos dias, sin dejar saldos pendientes.
El malestar de la fotógrafa es evidenciado y molesta como espectador ver ese sufrimiento en pantalla del cual nos sentimos involucrados.
Me resultó un film duro, sin necesidad de tener en su momento que presentarse en concurso sobre una elección en un Festival de Cine, no creo que haya sido la intención del director ni de la artista. Gabriela publicó un libro de fotos antes de su muerte en el que muestra su cuerpo desnudo, luego de un extirpado de pecho, según sus propias palabras “mostrando la sexualidad desde un cuerpo no sano”.
Título relacionado al acto de Roy Scheider en All That Jazz de Bob Fosse.