Otro traslado a la pantalla de un best seller para adolescentes, el nicho que está sosteniendo la maltrecha industria editorial. Con un asunto pariente de Hechizo del Tiempo, que cruza lo fantástico: un espíritu viaja de cuerpo en cuerpo, convirtiéndose cada día en una persona diferente. Así que la protagonista, la rubia Rhiannon, fascinada por un día inusualmente atento y romántico con su novio, termina por descubrir que está enamorada de alguien diferente cada día. Hombres o mujeres, blancos o negros, según un dispositivo demasiado explícito y dicho, en boca de sus distintos personajes para una sola personalidad. Pero aún así, con una mirada interesante sobre la diversidad de los vínculos y los afectos, y bastante más melancólica de lo que parece.