El debut de Lucia Vasallo en la dirección de un filme de ficción peca de pretenciosa, como si quisiera abarcar mas de lo que el texto permite, sumándole el “Mira como te lo cuento”. Desde esta perspectiva la utilización constante de escenas retrospectivas, algunas sin hilación (perdón por el neologismo) narrativa, solo aparecen o determinadas fantasías, sueños por parte del personaje protagónico