Caído del libro
Dos chicos y dos chicas de séptimo grado deciden ratearse de la hora de geografía, pero quedándose adentro de la escuela y para ello eligen un sitio que siempre les provocó curiosidad: el sótano. Y allá van, para pasar algo de tiempo juntos compartiendo inquietudes, vivencias, secretos. Sin embargo algo les sale mal a los chicos, la olfa de la clase se entera del plan y acaba metida en el sótano con las parejas.
El filme está basado en un exitoso libro de aventuras para chicos, y como suele suceder, su traslado a la pantalla guarda varias diferencias respecto al original. Obvio es que una película es una obra en sí misma independiente de aquello en lo que se base, y así debe tratarse. Por eso obviaremos que todo lo bueno que tiene el relato escrito falta en esta adaptación carente de sutilezas.
Como manda el cine de hoy todo se presenta velozmente, sin demasiado preámbulo. Esto provoca que el espectador no cree empatía con los personajes, a los que no termina de conocer; ni se le genere la mínima intriga sobre la historia. El conflicto se plantea de inmediato y solo queda ver el desarrollo hasta el final. En el medio se pueden disfrutar de las actuaciones de Karina K, como la desopilante maestra de geografía; Alejandro Paker en el rol del arrogante padre de la olfa y Tina Serrano como la directora de la escuela. Son más bien para padecer las actuaciones de los chicos, donde hace agua la dirección de actores. Por lo demás, se trata de un relato ágil, caricaturesco y entretenido que los más chicos pueden disfrutar. Aunque mejor será que lean el libro.