Con una explosión de efectos especiales que le dan marco a la historia del superhéroe, el Capitán América, en su versión 2011, tiene todo lo que una historia de superhéroes tiene que tener: acción, suspenso, la lucha entre el bien y el mal y también amor. El contexto de la película, la II Guerra Mundial, pone en la pantalla la mirada hollywoodense sobre este héroe, un flacucho muchacho norteamericano (con imágenes digitales se transforma en un bien formado héroe), exhaltando sus buenas virtudes y deseos de defender a la patria, en su lucha contra el villano Red Skull, líder de la división científica de los nazis. ¿Quien vence?, deberá verlo el espectador. El filme le dio movimiento a un comic de las década del 40 tiene mucha acción pero no ofrece una mirada novedosa sobre los héroes.