Capitán America: Guerra Civil (Captain America: Civil War) retoma la historia de Los Vengadores poco tiempo después de la lucha contra Ultrón en Sokovia. Se puede observar cómo los directores decidieron sacar a la luz diferentes víctimas inocentes que dejaron como resultado las peleas que llevaron a cabo estos superhéroes a lo largo de los años, y cómo ellos no se percataban que por hacer justicia, a su vez eran injustos con otros. Un dilema de largas charlas de Bar entre fanáticos y que por fin, un universo se atreve a tocar, aun siendo tan crítico con su inmensidad tanto de detractores como defensores, dando al público una nueva perspectiva de producción del mundo de superhéroes tocada con la frialdad necesaria como para involucrar al espectador. Todo esto trajo una trama mucho más madura y oscura nunca antes vista en otra película de Marvel Studios, que no deja cabo sueltos y donde abundan las sorpresas, tanto para ambas líneas de la historia que logran perdurar la incógnita y el hermetismo principal hasta el final de la producción, aun con su simplicidad característica del género, como algunas joyitas que nos traen los Russo en cuanto a personajes y que dan un resultado más que agradable para cualquier Marveliano.
Las dos horas y media pasan volando, a tal punto, que uno no se da cuenta del paso del tiempo y cuando termina la película, se queda con ganas de más, aun sin requerir la producción de sistemáticas escenas de acción que aunque están soberbiamente logradas, podrían ser consideradas como un aperitivo más para no dejar pasar gigantesca producción. Ahora bien. ¿Por qué es esto? Ademas de lo mencionado anteriormente, en primer lugar, porque tenemos la introducción de nuevos personajes. Por un lado, T’challa, o mejor conocido como Black Panther, interpretado por el actor Chadwick Boseman, un rey cegado con sed de venganza; un personaje que promete bastante y abre grandes puertas en el universo Marvel. Por otro lado, uno de los personajes estelares que todo el mundo esperaba, la aparición de Tom Holland en la piel de Peter Parker/Spiderman, que la rompe en este rol. Esta nueva versión de Peter más joven encaja muy bien dentro de la película y en el Universo Cinematográfico, y es otro de los personajes que promete mucho para sus películas en solitario con un perfil mucho más carismático de lo que venimos acostumbrados. El resto de los protagonistas, con mayor o menos preponderancia, no desentonan en ningún momento teniendo todos su mínima participación para no dejarnos con el gusto, algunos con un perfil más alegre, como Ant-Man (Paul Rudd) o Hawkeye (Jeremy Renner), y otros más sombríos como Vision (Paul Bettany) o Scarlet Witch (Elizabeth Olsen), pero sin salirse de los límites que amerita el conflicto que se desarrolla. ¿En contra? Si, podría considerarse la participación de Black Widow (Scarlett Johansson) como demasiada diplomática, aunque quien ya vio la película podría tirar por la borda esta teoría con la descripción de un par de escenas, razón por lo cual resulta completamente objetiva cada opinión. En cuanto a los villanos, Crossbones tiene una aparición reducida pero es uno de los detonantes fuertes para el desarrollo de la película, tal como Zemo (Daniel Bruhl), un ex-soldado, frío y calculador, que busca venganza por todos Los Vengadores. Y no podemos tocar más para no entrar en Spoilers, pero si garantizamos que el resto de los “villanos” mantiene un nivel más que aceptable. En conclusión, la estructura narrativa, uno de los puntos más altos, se sostiene con una base muy fuerte y no decae en ningún momento, donde los directores/guionistas supieron manejar muy bien el balance entre todos los personajes que aparecen en esta película, donde las participaciones se ven acompañadas de un guion sólido y maduro que sabe cuándo ser oscuro y cuando no, utilizando decenas de líneas tanto fuertes como cómicas que por suerte se adaptan a la perfección y no llegan a ser excesivas, aprovechando el disfrutar de la producción en su versión subtitulada y que esperemos tenga un resultado igual de satisfactorio en su versión doblada.
Por último, la banda sonora, que vuelve al mando de Henry Jackman, quien estuvo a cargo de la música de "Capitán America: El Soldado de Invierno", en la que incluyó un tono mucho más misterioso y diferente al estilo heroico y triunfal que había dejado Alan Silvestri en "Capitán América: El Primer Vengador". En este caso, el compositor decide fusionar ambos estilos para crear una fuerte banda sonora, que acompaña perfectamente cada escena, en especial, las escenas de batallas. Lo único malo que se puede decir al respecto a esta cuestión, es que el compositor no supo aprovechar la oportunidad de utilizar algunos de los leivs motivs previamente instalados en las otras películas, o la famosa melodía de Los Vengadores, que hubiera quedado muy buena si se le daba un tono más sombrío para esta película, por el ya sabido enfrentamiento.
En conclusión, podemos decir que esta nueva entrega de Capitán América va a dejar más que satisfechos a los fanáticos de la saga cinematográfica y a los no tan fanáticos, con nuevos personajes y situaciones que prometen una Fase 3 cargada de acción y misterio por descubrir.