A poco más de un mes del estreno de Avengers: Endgame llega Capitana Marvel al cine y, con ella, la dosis necesaria de acción y justicia (poética) que estábamos esperando.
La película nos lleva a recorrer junto a Carol Danvers (también conocida como Vers o Capitana Marvel) su historia de origen, una historia fragmentada y por momentos difusa (al menos para su protagonista).
Carol llega a la Tierra con una clara misión en mente: ponerle fin a la tiranía de los Skrull, una raza alienígena que se dedica a saquear, masacrar y conquistar distintos pueblos. Pero no todo es tan sencillo como parece y, tras cruzar camino con el agente de SHIELD Nick Fury, nuestra capitana deberá enfrentarse a una realidad mucho más compleja de lo que esperaba.
Si bien la trama es muy entretenida, con la dosis de humor y acción necesaria, vale la pena destacar la construcción del relato a través de los personajes. Brie Larson hace un trabajo impecable dándole vida a Carol Danvers, la primera heroína marvelita en encabezar una película del MCU. ¿Bastante tarde? Sí pero también seguro. Contrario a lo que muchos suponían (en base a escenas que se mostraron en los distintos tráilers y adelantos), la capitana es un personaje fresco, carismático y, por sobre todo, muy poderoso. Y, a su lado, nos encontramos con otros dos roles femeninos fundamentales para el crecimiento de nuestra protagonista, María Rambeau, su mejor amiga y compañera de aventuras y la Dra. Lawson, su mentora. Juntas, este trío de féminas nos demuestra que el poder y la fuerza está en la unión, en la hermandad. A diferencia de otros relatos fílmicos encabezados por mujeres, ni Carol, ni ningún otro personaje femenino en la trama necesita de la aprobación del resto ni de la mirada masculina para seguir adelante con su misión y su vida. Un mensaje clave y muy acertado, teniendo en cuenta los tiempos que corren y la conquista de mayor espacio para heroínas de acción en nuestras pantallas y en nuestras vidas.
Otro elemento a destacar es la ambientación en los noventa, con pequeños y memorables tributos a esa década, un vestuario que le va como anillo al dedo a Carol y una selección musical que acompaña de manera exquisita el espíritu de la época.
En definitiva, Capitana Marvel es una película muy necesaria no solo para el MCU, sino para ayudar a seguir construyendo un canon de heroínas de la cultura popular que derriben mitos y estereotipos, ya sea arriba de una nave espacial, peleando junto a otros héroes o salvando al mundo de la mano de su mejor amiga y su gato.