Carancho

Crítica de Nicolás Viademonte - Función Agotada

Carancho arranca con una pantalla de fondo negro y letras blancas que muestra las escalofriantes y trágicas cifras que tiene nuestro país en materia de accidentes de tránsito. Carancho es cruda y violenta, pero principalmente es real y los números sirven para situarnos dentro de esa realidad que nos muestra la película.

La crudeza es tal que podremos ver como suturan al protagonista luego de una golpiza o durisimos accidentes. Más de una vez nos vamos a tener que tapar los ojos porque es difícil de tolerar a veces. Los mencionados accidentes están filmados de una manera excelente y muy cuidada para que nosotros creamos cada una de las situaciones.

Pablo Trapero es un director que se caracteriza por hacer grandes historias de pequeños relatos. Aquí se puede ver un gran avance, debido a que la película toca muchos temas con mayor profundidad que en El Bonaerense, por citar un ejemplo. La historia entre Sosa y Luján es muy profunda y llena de matices que hacen que sea complicada, algo que no habia logrado con tal magnitud en la anterior cinta mencionada.

Volviendo a la realidad, Carancho nos muestra que esta película está afrontada desde el negocio de las indemnizaciones que existe detrás de las tragedias que rodean a los accidentes de tránsito. Podemos ver como se abusa de gente que carecen de educación y contención, y que es aprovechada por estos buitres que están buscando en todo momento la carroña que los alimenta.

Algo que quiero destacar es que este film no es para cualquiera, ya que es un drama muy contaminado con el típico policial negro que, si bien toca otros géneros como el romance, se puede volver un poco pesado debido a su lentitud. Tal vez con una narración más compacta hubiéramos estado en presencia de un resultado más que sobresaliente.

No tengo ninguna duda que Ricardo Darín es el mejor actor de cine de nuestra historia y el lunes estaré dedicándole una entrada dentro de la columna de opinión. Las actuaciones del intérprete de Nueve Reinas siempre se caracterizan por ser muy expresivas, y en este caso podremos verlo haciendo algo totalmente opuesto. Sosa es un hombre muy parco que solo muestra afecto por Luján y por momentos cuesta entender qué es lo que le pasa o siente, obviamente que ésto es algo totalmente intencional y eso es lo destacable de la caracterización de Darín.

Por otro lado vemos a la linda pero bastante rara Martina Gusman. Al comienzo la actuación de la actriz de Leonera no me terminaba de cerrar, su voz y sus gestos no los sentía, me eran indiferentes. Luego con el pasar de los minutos su personaje mejora y logra que uno sienta sus dolores y sus miserias.

En resumen Carancho es un gran drama con toques de policial negro. Trapero y Darín merecen que les demos una oportunidad, pero siempre entendiendo por donde viene la historia de esta original, cruda y violenta película.