Amor en tiempos de cólera
"Carol" es un drama amoroso lésbico de la escritora Patricia Highsmith que fue llevado a la gran pantalla con muchísimo talento y gracia por el director Todd Haynes ("Velvet Goldmine") y la guionista Phyllis Nagy ("Mrs. Harris").
La historia no es compleja. Se trata de un relato romántico en el que las protagonistas son dos mujeres de diferentes edades y estratos sociales en la década del '50. Si lo llevamos al día de hoy, no sería quizás demasiado revelador, pero como la novela se sitúa en una época en la que ser gay y encima mujer era un sacrilegio social, es que este relato toma un vuelo distinto y distinguido.
Lo primero que debo resaltar es el trabajo del director.
Haynes hace uso de su talento para colocar al espectador en medio de la historia y hacerlo transitar el difícil camino que sus protagonistas deben hacer para encontrar la felicidad.
Sus tomas, su progresión para ir desarrollando el affair, lo gestual de sus escenas, son todas herramientas que convierten a "Carol" en algo más que una historia de amor de gay. La producción es fantástica también, desde el vestuario hasta la banda sonora. Uno se siente que está realmente en otra época y logra percibir la tensión que imprimen los mandatos sociales de los años cincuentas.
En segundo lugar, pero no menos importante, está el gran trabajo que hacen todos sus actores empezando por la dupla protagonista, Cate Blanchett ("El Señor de los Anillos") y Rooney Mara ("The girl with the dragon tattoo"). Realmente sus roles son muy creíbles y carismáticos. La diferencia entre ambas personalidades y a la vez la complementariedad que demuestran son impresionantes.
Por último debo advertir a los espectadores que sean más del palo pochoclero y estruendoso. "Carol" es una historia sutil, que repara en detalles, que se toma su tiempo para ir creando la atmósfera. Les puede llegar a parecer un poco lenta, pero les diría que se abran a disfrutar de la profundidad del relato.
Aplausos para Todd Haynes.