Lo que podría ser el mayor fracaso de Pixar es, en realidad, una buena película de aventuras.
Cars 2 es muy diferente a la primera, eso es algo que hay que tener en cuenta desde el momento en que uno se sienta en la sala del cine. Las carreras quedan en un segundo lugar, e incluso Rayo McQueen ya no es el protagonista indiscutido. La historia pasa por otro lado, con otros perfiles y con nuevos personajes.
La estrella de esta secuela es, sin dudas, Mate (voz de Larry the Cable Guy), que se convierte -sin querer, claro- en un espía internacional bajo las ordenes del James Bond con ruedas Finn McMissile (voz de Michael Caine) y de su compañera, Holley Shiftwell (Emily Mortimer), dos agentes secretos que investigan una mafia formada por pequeños autos rusos que luchan contra los promotores de los combustibles ecológicos, en especial contra Sir Miles Axelrod (voz de Eddie Izzard), el mayor promotor mundial de ese tipo de energía.
Por otro lado, Rayo (voz de Owen Wilson) se involucra – por culpa de Mate- en una serie de carreras que lo llevarán a competir por Italia, Francia y Japón, y que lo enfrentarán al engreido Formula 1 Francesco Vernoulli (voz de John Tuturro), pero esto queda en segundo plano cuando, de repente, todos los automóviles que utilizan combustibles ecológicos comienzan a estallar, y es allí cuando las dos historias se mechan, ¿quién está detrás de todo esto?, ¿quién es el jefe de la banda de los pequeños carcachos rusos y por qué están tan resentidos con los automóviles más tecnológicos? Solo Mate -si, el tonto Mate- podrá descubrirlo.
Para ser sinceros, la película es bastante peor que la primera entrega, pero no es el caos horrible que se dice en todo el mundo. El gran problema es que tiene la firma de Pixar y, por eso, nuestras expectativas quedan por las nubes. Si este mismo trabajo lo hubiera hecho, sin ir más lejos, Dreamworks, todos estaríamos hablando de lo graciosos que quedan los autitos metiendose en conflictos como James Bond.
La parte más destacable de Cars 2 la aportan, sin dudas, el gran Michael Caine, Emily Mortimer y John Tuturro, que con sus chistes presumidos y su italiano esteriotipado se convierte en un personaje facil de odiar pero, a su vez, encantador. Las (p0cas) carreras que se ven están realizadas con maestría y el trabajo que se realizó en los paisajes es sencillamente increible. En los planos lejanos, los autos parecen ser autos reales, y no artefactos con ojos y boca.
Para cerrar, Cars 2 es una buena película. Buena, no mucho más que eso. Si la misión es entrar al cine, divertirse y salir, este nuevo trabajo de Pixar lo cumple.
¡Ah!, no se olviden que antes de la proyección principal también podrán ver el nuevo corto de Toy Story, Hawaian Vacation. Es difícil hacer una review de un corto, y más dentro de otra review, así que voy a limitarme a decir que es excelente, y que traten de llegar temprano al cine para verlo.