La tercera, y acaso mejor de la saga de Disney Pixar encuentra a rayo Mcqueen con un competidor más joven, más tecnológico, más rápido. Sí, este es un film sobre el paso del tiempo, crepuscular y poético como un western clásico, que reivindica la vieja escuela y los viejos maestros, en una serie animada de autos con boca y ojos. No alcanzan los dedos de la mano para contar las magníficas secuencias y detalles que regala, entre escenarios de playas, bosques y desiertos de una belleza abrumadora. Crisis y lección de vida sin discurseo y a pura acción. ¡Y volvemos a escuchar la voz de Paul Newman!