Los castores del fin del mundo
En Castores. La invasión del fin del mundo, la dupla de directores Pablo Chehebar y Nicolás Iacouzzi se despachan con un eximio trabajo de investigación que, acompañado de imágenes de archivo, entrevistas y animaciones, conforman un documento valioso y urgente sobre una situación que está a punto de salirse de control.
En la década de 1940, veinte castores fueron traídos desde Canadá a Tierra del Fuego con el objeto de fomentar la industria peletera y así poblar uno de los rincones más inhóspitos de nuestro país. Setenta años después, las consecuencias de este plan son devastadoras. Los castores están terminando con los bosques y los lagos de la Patagonia.
El documental dirigido, escrito y producido por Iacouzzi y Chehebar pone de relieve la controversia que suscita este invasor entre los conservacionistas por un lado que piden por un control de la población, y los ambientalistas e investigadores que aseguran que no hay otra salida que eliminar a esta especie no autóctona.
Esta cuestión sobrevolará todo la obra y los directores realizan un relevamiento de todas las industrias que se fomentaron por parte del Estado para controlar la plaga. Una diseñadora de modas, un cocinero y hasta un “castor” que recorre las calles de Ushuaia repartiendo volantes sobre las principales atracciones turísticas desfilan frente a la cámara y ponen en evidencia la ambición descontrolada del hombre sin prever las consecuencias.
Los directores presentan la situación de una manera didáctica y fácil de digerir utilizando como base una investigación rigurosa y completa formada por un archivo fotográfico variado y por la opinión de los investigadores que estudian el tema desde hace más de veinte años.
Castores. La invasión del fin del mundo, es una obra formidable que deja al desnudo la ignorancia que emana desde el Estado sobre un problema que podría haberse evitado y, al mismo tiempo, sobre el afán del hombre por conquistar territorios sin tener en cuenta el grave daño que se puede ocasionar al ecosistema.