RÁPIDO Y FURIOSO
Patrulla Motorizada fue un serial protagonizado por Erik Estrada y Larry Wilcox que formó parte de la década en la que la ley empezaba a coquetear con la cultura de las drogas (como ocurrió en otras series como Shaft o Starsky & Hutch). Creada por Rick Rosner y Paul Playdon, fue emitida por NBC desde septiembre del ’77 hasta mayo del ’83. Hoy en día, Dax Shepard produjo, escribió y dirigió esta reversión de la serie que no solo tiene pocas conexiones con la original sino que poco innova en el abordaje de la misma.
En su corta carrera en la dirección, con Patrulla Motorizada Recargada (una tragedia cacofónica), Shepard sigue la tradición fierrera de sus predecesoras Hit and Run (2012) y Brother’s Justice (2010), y aquí interpreta a Jon Baker, un ex motociclista profesional que ha conocido la gloria y ahora se encuentra en una crisis matrimonial. En un intento desesperado por recuperar a su esposa Karen (Kristen Bell, su esposa en la vida real), entra a la Patrulla Motorizada de California (CHP). Al ser emparejado con Frank Poncherello (un Michael Peña que parece empezar a encontrar su registro), Baker se une a la cruzada de éste, en la intención de desenmascarar una banda de policías que asalta blindados.
Ya desde el comienzo, las intenciones de la película son claras: una buddie movie de policías, repleta de chistes básicos y sexistas que solo encuentra el rumbo en alguna secuencia de acción cuya estilización y fluidez, de alguna manera, alivian el tedio facilista del resto del metraje.
Y el problema no es el gag sexual o dialéctico per se, porque hay un subgénero del humor que bien ha sabido sacarle provecho a esto (Sascha Baron Cohen), sino que Shepard hace todo lo que está cinematográficamente a su alcance para que sepamos lo que quiere decir.
En una de sus inolvidables noches, en La Venganza Será Terrible, Dolina ensayaba – en sus palabras, hilarante – que su película contendría aclaraciones explícitas constantes de él mismo, mirando a cámara, explicando lo que quiso decir en tal o cual escena. Shepard claramente no llega a hacer lo mismo, pero sus primeros planos y los planos detalle enmarcan y explicitan el chiste hasta el absurdo, y se trata de una clara subestimación del espectador y del uso de la narrativa básica.
Si bien hay un correcto desarrollo de las secuencias físicas y de la relación de Baker y Poncherello (en su progresión, no en la química cómica – el carisma de Sheppard es nulo -), Patrulla Motorizada Recargada es una película totalmente fallida que solo toma el nombre de aquella serie original para poner en pantalla mucho de lo peor de la comedia norteamericana: machismo, fisicidad y sexismo.