Otra película del creciente cine cordobés (aunque esta no pertenece al, digamos, “núcleo duro” de la nueva movida de cine de esa provincia), CIENCIAS NATURALES también se ocupa de un tema que es bastante cercano al cine argentino de los últimos tiempos: los niños en busca de su identidad, en ese momento clave de sus vidas en el que la infancia comienza a desaparecer y empiezan a tomar conciencia de ciertas duras realidades.
La niña protagonista de la opera prima de Matías Lucchesi –premiada en cuanto festival se exhibió desde su estreno mundial, en febrero, en la Berlinale– habita en un pequeño pueblo de esa provincia y tiene una historia familiar complicada: nunca conoció a su padre y está obsesionada por saber quién es. Su madre no quiere o no sabe cómo ayudarla y la chica empieza a dar muestras de su crisis en el colegio: se la ve agresiva, solitaria, tratando de fugarse todo el tiempo. Finalmente, gracias a la ayuda de una maestra (Paola Barrientos), que va entendiendo cómo este problema la afecta, emprende un viaje con un mínimo dato que, supone, le servirá para encontrar al padre. Dato que, obviamente, será muy parcial y las iniciará en un camino casi detectivesco.
ciencias naturalesLa película seguirá esa pesquisa para transformarse en el retrato de una serie de personajes a los que la vida fue llevando por caminos inesperados. No solo a las protagonistas, sino a los seres en su mayoría solitarios con los que se cruzan en su “road movie”. Un buen elenco (Barrientos, la niña Paula Hertzog, Sergio Boris y Arturo Goetz, entre otros) y una trama sólidamente construida hacen de CIENCIAS NATURALES una especie de fábula de tono realista para un público juvenil, gracias a la utilización de la música y algunos recursos narrativos. Ell filme asume el punto de vista inocente de la protagonista y presenta sus desventuras de forma cercana a un cuento para toda la familia. Como su título –y algunas metáforas usadas en el relato– lo indica, eso es CIENCIAS NATURALES, una fábula sobre la identidad y la reconstrucción.