50 Sombras más Oscuras: Cada vez nos falta menos, para no volverlos a ver.
El film cuya única trama es la relación mas aburrida de la historia del cine nos trae su casi igual de horripilante secuela, a continuación les voy a enumerar las multiples razones por las cuales no deberían verla.
Las secuelas generalmente no superan a sus predecesoras, por cada The Dark Knight, Mad Max: Road Warrior o Terminator: Judgament Day hay cientos de ejemplos que no cumplen la tarea. 50 Sombras más Oscuras apenas supera a 50 Sombras de Grey, sin embargo el film de James Foley también tiene todos los números para entrar en otra lista, la de peor película del año.
En esta entrega Anastasia Steele (Dakota Johnson) comienza trabajando en una editorial, su trabajo soñado, alejada por decisión propia de la relación sadomasoquista en la cual se veía envuelta con el multimillonario Christian Grey (Jamie Dornan). La película se toma unos buenos 10 minutos hasta volver a establecer a estos dos como una pareja, mediante los siempre seductores esfuerzos de Grey de llevar el acoso sexual a su máximo limite, cuando compra todos los retratos de Anastasia en una muestra de arte “porque no quiere que nadie más la vea así”, estrategias de levante naturales a los que nos tienen acostumbrados estos films. A partir de una cena en la que Grey muestra ciertos signos de arrepentimiento por sus acciones en la historia previa, mágicamente tenemos a nuestra pareja preferida de vuelta en un viaje de 2 horas que más que una película, parece el zapping de una octogenaria que no sabe usar bien el control remoto y va de una serie de videoclips subidos de tono (no tanto como esperaríamos) con el 90% de la banda sonora de fondo a una novela con pésima edición, chistes que solo surten efecto cuando se están burlando de la misma trama de la película y destellos de drama que no van a tener sentido hasta que veamos las 20 continuaciones que nos depara el estudio.
Comencemos enumerando los (pocos) aspectos positivos, arrancando por el más importante: la película no se toma muy seriamente a sí misma, lo cual da lugar al humor, inexistente en la primera entrega, a partir de la absurda situación en la que se encuentran los personajes. En segundo lugar y complementándose con el primero, Christian Grey muestra que no es un robot brindando cierta profundidad a la historia de su personaje y hasta tira uno o dos chistes en el transcurso del film. La adición de Kim Bassinger como Elena, la dominatrix que inicio a Christian en el sadomasoquismo, es lo más cercano que vamos a tener a un buen antagonista y por ultimo Dakota Johnson, quien vuelve a destacarse dentro de lo posible dándole peso a los momentos dramáticos del film y vendiendo casi exitosamente la idea de que Ana puede cambiar a este ser humano que todavía tiene una habitación del tamaño de un mono ambiente lleno de artefactos para practicar BDSM.
Por el lado negativo, la película vuelve a cometer muchos de los errores de su antecesora: llegando a unas eternas dos horas muchas de sus escenas parecen cortadas o mal editadas, dejando a casi todos los personajes secundarios sin ningún tipo de desarrollo. La relación entre los personajes principales sigue sin tener química, especialmente para una dupla que lleva dos películas en su haber, y que es el foco primario de ambas. La historia que rodea la película no tiene ningún tipo de objetivo ni búsqueda de los personajes, simplemente se van sucediendo una escena en la cual conocemos a un personaje al que vamos a ver solo 2 veces en toda la película tras otra escena de sexo en la cual tenemos un tutorial de cómo usar alguno de los juguetes del señor grey, seguida por algún tipo de accidente que amenaza la vida de nuestros personajes principales, y si no lo estoy señalando como algo positivo es porque probablemente no tenga ningún tipo de desencadenante previo o todos los involucrados se hayan olvidado de lo ocurrido para la siguiente escena. El guion sigue siendo atroz y repleto de frases torpes que hacen temblar de incomodidad, aunque al no haber leído ninguna de las novelas temo que este sea el mejor esfuerzo posible de adaptar el material de origen.
El uso de la música hace que el remix de presentación de los personajes en Escuadron Suicida parezca una obra de arte, ya que hay que soportar un nuevo tema de fondo cuya unica función es distraer cada vez que Ana y Christian tienen sexo o este ultimo esta ejercitando, por alguna extraña razón que desconozco. Por último, y tal vez una de las razones más importantes por la cual la película falla, la relación entre los protagonistas sigue sin tener justificación alguna, no hay razón por la cual Anastasia decide volver con el acosador serial luego de lo que paso al final del primer film, no hay razón por la cual Christian corrija sus hábitos de años por una mujer a la que conoce hace pocos meses y si la razón que tenemos que comprar es que “en el fondo se aman y quieren estar juntos” tampoco hay razón para que nadie vaya a ver esta película. Este fin de semana estrena Lego Batman, mejor vayan a ver eso.